El Guardés despide a Abel González y Ana Seabra ya dirige al equipo

Despido. El Mecalia Guardés oficializó ayer el relevo en el banquillo tras la derrota del pasado sábado ante el Elche en A Sangriña (23-24). Abel González deja de ser el entrenador del conjunto del Baixo Miño y se hace cargo del equipo la hasta ahora segunda entrenadora, Ana Seabra, que tendrá el apoyo del preparador físico, Joao Mesquita.

Por lo tanto, el relevo pasa por el líder del cuerpo técnico actual, pero se mantienen sus colaboradores, que dan un paso adelante. El tiempo dirá si la modificación sirve para cambiar la dinámica de la escuadra, que marcha en la novena plaza. Es decir, en una posición que obliga a disputar la fase por la permanencia tras terminar la liga regular.

De hecho, la actual campaña es la peor del conjunto de A Guarda desde su ascenso a División de Honor hace más de una década y el club resaltó que es el primer despido de un entrenador. El relevo en el banquillo, que se produce a mitad de curso, llegó tras perder ante el Elche por un único gol y en un duelo en el que el equipo ofreció una buena imagen. Eso sí, fue una derrota que se acumula a una mala trayectoria que tuvo su peor momento el pasado 21 de enero cuando el equipo perdió 21-14 en la visita al Granollers, un rival directo. Tras ese duelo ya se barajó el despido del técnico, pero finalmente se mantuvo en el puesto dos semanas más.

La trayectoria del Mecalia Guardés en los últimos meses dentro de la División de Honor es mala. En los últimos siete enfrentamientos, ganó un único partido y resultó contra todo pronóstico porque el triunfo llegó ante el Málaga, que marcha segundo en la tabla clasificatoria. Se dio la circunstancia de que, en ese enfrentamiento, fue Seabra la que llevó en primera persona al equipo y González ejerció de asistente porque en los días previos pasó el covid.

La entrenadora lusa pasa a ser la primera técnica en el duelo de cuartos de final de la European Cup ante el Madeira, que se disputa el sábado. Conoce bien el club porque jugó allí siete años.

Abel: “La plantilla me la dieron hecha y tomé la decisión de entrenarla”

Abel González asume con naturalidad su despido del Mecalia Atlético Guardes. “No son agradables este tipo de cosas. La vida del entrenador pasa por los resultados y si no son todo lo buenos que quiere el club, es lo que hay”, expresó. Sobre si el despido lo sorprendió, relata que “siempre esperas que, si no llegan los resultados, pueda suceder. Igual no lo esperaba ese día porque el equipo estaba en un buen momento de juego. No se ganó el partido, pero sí que sabía que podría suceder. Es la directiva la que toma la decisión y hay que acatarlo”.

El Guardés perdió por un gol ante el Elche (23-24), que “tiene una gran plantilla y venía enrachado. Era difícil superarlo, pero me queda la pena de que era el primer partido jugado en A Sangriña y que era bonito ganarlo. Lo tuvimos, pero unos detalles tontos al final, nos lo impidieron. Aún así, creo que se peleó y que el equipo tuvo opciones de ganar”.

El Guardés marcha noveno, una posición en la parte baja, y González explica, sobre el potencial de la plantilla, que “el sábado estábamos sin Ángela Nieto y sin Júlia Nuez, que eran dos jugadoras importantes, sobre todo para defender. Estamos un poco descompensadas. Y nos faltó acierto en momentos clave. Hubo partidos en los que fallamos cinco penaltis, como en Gijón, y ante el Granollers, tuvimos 24 errores no forzados. Hubo muchos partidos en los que la portera contraria fue la protagonista. Erramos mucho de cara a la portería y son cosas que son complicadas porque llegas a la conclusión de que creas muchas opciones, pero si no las metes, ya no está en tu mano. Es la jugadora la que tiene el balón para meterla y la portera la capacidad para pararla”.

De regreso a la confección de la plantilla, Abel Gonzáldez admite que “el equipo me lo dieron hecho. Yo aporté para traer a Pauli Fernández y, un poco, Júlia Nuez, que la tuvimos disponible 20 minutos. Estaba la plantilla hecha y yo también tomé la decisión de cogerla. Aún así, creo que hay plantilla para hacerlo bien y se hará cuando se tranquilicen las cosas”. Respecto a ello, González matiza que “soy optimista para lo que queda. El Guardés tiene siete partidos en casa, lo que siempre ayuda, y dos fuera ante equipos a los que ya ganamos bien. Con el sistema de competición existente, puedes ser octavo y ganar la liga”, finaliza el ya extécnico del Guardés. Será Ana Seabra la encargada de sacarle ahora rendimiento al equipo.