La familia crece en Coia

Atletismo

Sara López anotó este año a 23 personas para la Vigo contra el Cáncer, una cita a la que permanece fiel junto a sus padres, Sonia y Antonio, desde la primera edición del evento

El grupo de la familia López se amplió con los años y en 2024 el grupo rozó los 20.
El grupo de la familia López se amplió con los años y en 2024 el grupo rozó los 20.

Cuando se habla de la magnitud de la Vigo contra el Cáncer, se traslada una prueba popular que es solidaridad colectiva, familiar y grupal. Un evento que va más allá del deporte y que, a lo largo de su década de duración, construyó una auténtica cita social y uno de los mejores ejemplos es la familia López. “Fui todos los años. En la fotografía de 2015 somos cinco personas con mis padres, unos amigos de mis padres y yo. Para la edición del domingo anoté a 23 personas y va alguna más que se anotaron ellos. Estaremos sobre los treinta”, explica Sara López, que a los 25 años ejerce de particular coordinadora de la familia y admite que “para nosotros ya es una tradición. Algunos de la familia son deportistas, pero otros no lo somos y solo hacemos la de Coia. Además, después hacemos una comida juntos”, amplía sobre la particular reunión deportiva y familiar para, entre risas, argumentar que “algunos corren y otras acompañamos".

Sara López, en el centro, junto a sus padres, Sonia y Antonio (a la derecha), en 2015.
Sara López, en el centro, junto a sus padres, Sonia y Antonio (a la derecha), en 2015.

El crecimiento de los López es también parte del crecimiento del evento que vive ‘A Derradeira’ tras anunciar la asociación Vigo contra el Cáncer que dejará su labor en las próximas semanas. Comenzó con un evento con ilusión y participaciones pequeñas y, con los años, creció hasta superar los 4.000 inscritos e, incluso, acercarse en alguna edición a los 5.000, que es el máximo. Un crecimiento como los López porque “cada año somos más, ya que se van uniendo los pequeños de la familia”. Así como Sara López llegó al evento de adolescente, hay niños que “algunos están desde menos de un año. Primero en el carrito y ahora ya caminando para hacer la de cinco kilómetros, que es en la que vamos juntos”. Y, por supuesto, en el grupo se explican los motivos por los que se va. “Se lo explicamos y no saben los que es el cáncer, pero sí saben que hay que ir cada año para ayudar y eso sí que lo entienden”, manifestó.

Tres de cuatro abuelos fallecieron por cáncer; es raro encontrar una familia sin afectados”
Es una tradición familiar. Es la única carrera que hago en todo el año y después nos vamos a comer” — Sara López - Participante en la Vigo contra el Cáncer

La deportista insiste en que “para nosotros es una tradición, como también la lluvia porque siempre llueve y también dan lluvia para este domingo". Una situación que también es particular historia familiar: “Mi padre tiene la costumbre de enviar un mensaje por el grupo algo así como ‘aunque no apetezca a salir con esta lluvia, el motivo lo merece. Pensar que hay gente que le encantaría poder hacer esta carrera y no puede, pero nosotros sí’. Y no falla nadie. Aparecen todos”, argumenta Sara López.

Sobran los motivos para acudir a Coia a correr en la prueba larga o caminar en la corta. La Vigo contra el Cáncer recauda fondos para la investigación contra la enfermedad y Sara explica que en su familia también golpeó duro la enfermedad porque “tres de mis cuatro abuelos fallecieron por cáncer. Una de mis abuelas cuando tenía dos años y otra con once, que ya lo recuerdo y fue duro. Por eso intentamos involucrar a más gente. La verdad es que afecta mucho, ya que es muy raro y también afortunado encontrar a alguna familia que no tenga una persona afectada por cáncer”. La joven reflexiona y encuentra las motivaciones para, año a año, estar en el barrio de Coia para hacer los 5.000 metros de la carrera/andaina. En su caso, “voy al gimnasio, pero es la única prueba a la que me anoto en todo el año”. Incluso, “viví seis años fuera de Vigo por motivos de estudios y el fin de semana de la carrera venía para hacerla. No podía dejar de ir”, reflexiona. Un gesto que indica la notable implicación de los López en el evento vigués y que transciende a los presentes en la ciudad porque “tengo una prima que no puede venir, pero que se anotó igual. Quieren estar colaborando con la inscripción, con su nombre y también para tener la camiseta. No quiere dejar de estar presente”. Todo grano de arena para pelear contra el cáncer es notable.

La inscripción se cerró en 4.273 participantes

La Vigo Contra el Cáncer dio a conocer ayer que la participación para la edición del domingo se eleva a 4.273 personas tras cerrarse el plazo de inscripción en la medianoche del lunes al martes. De esta forma, no se alcanzó la cifra tope, establecida en los 5.000 participantes, pero sí habrá una asistencia notable al evento, que será la última cita de la prueba. A la prueba competitiva de 10 kilómetros y puntuable para el certamen Run Run Vigo se anotaron más de 800 pesonas y el resto irá a la carrera/andaina de 5.000 metros. La retirada de dorsales será el sábado en El Corte Inglés (10:00 a 21:00 horas) y el domingo en la zona de Coia (8:30 a 9:30). Como es habitual, el evento se realiza en Coia, con epicentro en la Avenida de Castelao, que, gracias a su amplitud, permite un evento de estas características. El recorrido será de una vuelta hasta la Fundación Sales -entrando en la Avenida de Europa- y regreso por Castelao para dar vuelta hasta cerca de Praza América. La prueba larga es de dos vueltas y la corta, de una.

Contenido patrocinado

stats