Un derbi en otra Tercera

Aroma a tradición, a pasión por lo cercano, a la grandeza de lo modesto. La Tercera División siempre fue barro, lucha y orgullo por lo propio. También socializar, tomar el café en la cantina, probar suerte en la rifa y dejarse los pulmones en la grada. O ver el partido a pie de campo, de pie, con los brazos apoyados en la barandilla. La Tercera Federación mantiene muchos de estos atributos. Pero no es lo mismo. La reestructuración de las categorías debido a la pandemia del coronavirus hizo que la puerta de entrada al fútbol estatal y la de salida del autonómico -que es la misma- pasase de ser el cuarto escalón a ser el quinto. Una rebaja que, forzosamente, se nota en la calidad.

Pero un nivel inferior no tiene por qué traer un menor interés. La pasión por el Alondras en Cangas continúa intacta. Y por eso se espera un gran ambiente en el único derbi del área de Vigo que se disputa este año. Será el domingo, al mediodía, frente al Gran Peña y en el exilio del Iago Aspas Juncal de Moaña debido a las obras de O Morrazo. Un duelo entre ambos márgenes de la Ría de Vigo, al que los dos equipos llegan empatados a 18 puntos en la mitad de la tabla y con los ojos puestos en una zona de play-off que se encuentra apenas a tres unidades.

“Va a ser un partido disputado”, advierta Antón Iglesias, conocido unánimemente en el mundillo como Kopa. El jugador del Alondras reconoce que su equipo llega “en buena dinámica”, con dos victorias consecutivas que cerraron casi dos meses sin triunfos. “Vamos a intentar alargar la racha. Ojalá podamos sumar de tres”, desea.

Por parte viguesa, Antón de Vicente tiene claro que el Alondras no va a dar ninguna facilidad. “Es un equipo que viene al alza. Empezó algo irregular, pero ahora se está mostrando como un rival muy fuerte”, destaca. “Era de esperar, con el nivel de jugadores que tiene. Del centro del campo hacia adelante tiene individualidades de alto nivel para la categoría. Te pueden complicar el partido”, sostiene el centrocampista vigués, inmerso en una segunda juventud en el equipo de Lavadores, que está sacando sus mejores resultados a domicilio. “Queremos seguir en la línea bastante potente que estamos llevando fuera de casa. En Barreiro nos está costando mucho”, subraya.

Kopa devuelve el halago desde el norte de la Ría. “Sabemos que el Gran Peña tiene buenos jugadores”, reconoce, al mismo tiempo que desvela que han estudiado “sus posibles carencias” para poder hacer daño en un campo Iago Aspas con un césped impecable, algo que agradecen -y mucho- los futbolistas rojiblancos, que llevaban años padeciendo en sus físicos el lamentable estado del terreno de juego de su recinto. “Poder jugar ahora en Moaña nos beneficia mucho porque somos un equipo de toque. En O Morrazo nos estaba costando”, reconoce el defensor baionés.

“El Alondras viene al alza; del medio hacia adelante tiene individualidades de alto nivel” — Antón de Vicente - Jugador del Gran Peña

De Vicente tiene claro que es “un partido importante” para ambos equipos, aunque, lógicamente, él se centra en el Gran Peña. “Nos jugamos seguir ligados a los equipos de arriba y de paso alejarnos un poco más del descenso. Le damos vital importancia para acabar bien el año fuera y la semana que viene en casa contra el Barbadás”, explica el jugador vigués, que a punta a “intentar tener protagonismo con balón” cuando se pueda y cuando no, “intentar robar y transitar con los futbolistas rápidos que tenemos en las bandas y la capacidad de Fran (López) desde el enganche”.

En cuanto al nivel de la liga, Kopa se centra en su propia experiencia. “Ya llevo unos cuantos años y me parece que el nivel es más o menos similar”, confiesa el de Baiona, a sus 30 años. “Siempre aparecen chavales jóvenes que exigen. Sobre todo a los que ya tenemos un poquito más de edad”, bromea el futbolista del Alondras, con vivencias en Atios, Choco y Rápido en este peldaño competitivo. “Es una Liga bonita porque es muy pareja”, subraya. “A la mínima que no sumas de tres, los equipos te pasan por encima en la tabla”, explica el jugador valmiñorano. “Para casi todos los equipos la salvación es el primer objetivo. Cuando el trabajo esté hecho, es el momento de intentar soñar, perseguir los puestos altos y si se puede jugar un play-off, genial”, remata, pensando en su Alondras.

Por su parte, el futbolista del Gran Peña, con una trayectoria de más de 400 partidos entre Segunda B y Segunda Federación, confiesa que algunos jugadores de su estilo eligen la Tercera “por comodidad y cercanía”. Pero eso no evita que la competición tenga una gradación de fútbol menos pujante que antes de la pandemia. “Con respecto a las ligas que viví otros años, ha bajado mucho el nivel”, confiesa Antón, que jugó -y ascendió- en la antigua categoría cuando estaba en el Celta B y al principio de su carrera, en el Coruxo. “Es cuestión de número. Segunda B pasó de cuatro grupos a dos en Primera Federación y 5 en Segunda. Los jugadores de nivel se van a esas ligas y queda una Tercera más tocada, a pesar de que aquí en Galicia no está nada mal la categoría. Pero los futbolistas importantes se suelen ir porque hay más hueco”, concluye De Vicente, que como Kopa, el domingo participará en un derbi de otra Tercera.