Un debutante para salir del bache

Dos derrotas consecutivas han dejado al Celta con sólo tres puntos de colchón sobre la zona de descenso, por lo que el partido que disputará mañana en Balaídos ante el Huesca (13:00, Bein) se presenta como decisivo a pesar de que solamente se ha cumplido un tercio de la competición liguera. Y es que, como reconoció esta misma semana Iago Aspas, "ahora mismo nos viene un rival casi directo como el Huesca y tenemos que sacar adelante este partido, eso es importantísimo. No es una final porque todavía queda mucha Liga, pero está claro que a nadie le gusta verse ahí abajo".

El equipo oscense, fundado en 1960, compite por primera vez en su historia en la máxima categoría del fútbol español tras el ascenso conseguido el pasado curso y, tras trece jornadas, ocupa el último puesto de la clasificación con un balance de una victoria, cuatro empates y ocho derrotas. Es decir, siete puntos, la mitad de los que ha sumado el conjunto vigués.

Y eso que la campaña empezó bien para el Huesca, que en los dos primeros encuentros logró una victoria en Leganés (1-2) y un empate a domicilio ante el Athletic (2-2). Desde entonces, sin embargo, los resultados no han acompañado al equipo que entrena el andaluz Francisco Rodríguez.

Nada menos que doce jornadas acumula ya el cuadro aragonés sin conocer la victoria, un tramo de Liga en el que se ha convertido en el segundo equipo que más goles encaja, con 27 y sólo por detrás del Rayo Vallecano (28), y en el tercero que menos marca, con 12 dianas, una estadística negativa que sólo superan el Valladolid (9) y el Leganés (10).

De hecho, su máximo goleador, Álex Gallar, ha anotado solamente tres tantos, dos de ellos en el primer partido de la temporada, contra el Leganés, y le sigue Etxeita, con dos.

Pese a sus malos resultados, sin embargo, el Huesca ha competido en casi todos los encuentros de Liga en el curso actual. Los de Francisco sólo ha perdido tres partidos por más de un gol, frente al Barcelona (8-2), el Atlético de Madrid (3-0) y el Espanyol (0-2). En el resto, tuvo opciones de puntuar y estuvo metido en el choque hasta el final.

Al margen de sus méritos y debilidades actuales, el Huesca no se le ha dado especialmente bien al Celta a lo largo de la historia. Ambos conjuntos se han enfrentado diez veces hasta ahora, nunca en Primera División, con un balance equilibrado: tres victorias celestes, tres triunfos oscenses y cuatro empates.

Las últimas veces que se vieron las caras antes de mañana fueron en la temporada 2011/12, en Segunda División. En la primera vuelta, en Balaídos, el Celta goleó a los aragoneses (4-0) el 22 de octubre de 2011, en un encuentro en el que marcaron De Lucas, Joan Tomás y Iago Aspas, este último por partida doble.

El moañés es precisamente el único futbolista de la actual plantilla celeste que disputó aquel partido, ya que tanto Sergio como Hugo Mallo lo vieron desde el banquillo.

En la segunda vuelta, el 24 de marzo de 2012, Celta y Huesca se enfrentaron por última vez hasta ahora en El Alcoraz y el choque terminó en tablas (1-1). Vázquez abrió el marcador para los oscenses y Joan Tomás empató en el tramo final. De la actual plantilla celeste, jugaron aquel partido de inicio Sergio y Hugo Mallo, mientras que Aspas entró en la segunda parte, en sustitución de Orellana.

Desde entonces han pasado más de siete años y el Huesca de hoy poco tiene que ver con aquel. En el equipo de Francisco militan dos exjugadores del pasado reciente del Deportivo, Pablo Insua y el portugués Luisinho, además del ourensano David Ferreiro, que jugó no hace mucho tiempo en el Lugo.

El Celta se plantea la cita de mañana en Balaídos casi como una final, pero enfrente tendrá a un rival todavía más necesitado de puntos, un Huesca que no quiere que su experiencia en Primera División sea efímera. n