A la carrera en Vigo con humor y diversión

La Carreira de San Silvestre viguesa, suspendida el pasado 31 de diciembre debido al fuerte temporal que azotó Galicia en aquellas fechas, se celebró ayer por las calles del centro de la ciudad, en plena temporada de Entroido y con la participación de miles de personas.

La Porta do Sol fue el epicentro de una prueba de carácter no competitivo y con un recorrido de cuatro kilómetros en el que se mezclaron las zancadas y las risas. Vampiros, piratas, bufones, pierrots, forzudos de circo, personajes de Disney, indios, vaqueros, superhéroes, habitantes de tebeos, extraterrestres, astronautras, presidiarios, jugadores de baloncesto, bañistas, policías, cheerleaders, un cubo de rubik y hasta una resucitada Isabel II, reina de Inglaterra, convivieron en la carrera con los gorros de Papá Noel y un árbol de Navidad, reminiscencias de las fiestas de hace un par de meses, revividas ayer en el centro de Vigo.

Desde la Porta do Sol, los participantes enfilaron hacia Policarpo Sanz para bajar a la calle Areal y regresar por el Casco Vello al punto de salida, donde se ubicaba también la meta. Como la prueba no era competitiva, no hubo clasificación ni premios para los primeros en llegar, pero sí galardones para los mejores disfraces, que fueron entregados por el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y el concejal de Deportes de la ciudad, Manel Fernández.

El rotundo éxito de la cita, a pesar de celebrarse fuera de su fecha habitual, llevó al máximo responsable del Concello a anunciar la recuperación de la carrera popular del Entroido, una competición que tuvo varias ediciones en el pasado pero que se había abandonado en los últimos tiempos. De esta manera, Vigo contará con dos pruebas populares con disfraces, la tradicional San Silvestre, que volverá al 31 de diciembre, y la del Carnaval, con una fecha todavía por determinar pero que volverá a llenar de color y sentido del humor las calles del centro de la ciudad.