En busca del vigésimo adiós invernal

Desde el último ascenso del Celta a Primera División, allá por 2012, todos los mercados de enero salvo uno (2015) han contado con al menos un par de salidas. El efecto corrector de esta ventana invernal ha servido, en la mayoría de los casos, para acordar cesiones de futbolistas que no estaban contando con minutos, pero también ha habido algún traspaso sonado y un puñado de rescisiones de contrato. Este enero, el club está intentando precisamente rescindir su relación con tres futbolistas: David Costas –que acaba contrato en 2023–, Jorge Saénz –cedido en Vigo por el Valencia– y David Juncá –que firmó hasta 2023 pero con posibilidad de corte este verano–. Del éxito de estos acuerdos dependerá la capacidad para reforzar la actual plantilla, más allá de la ya apalabrada llegada de Aarón Martín.

Los dos primeros eneros tras el ascenso sirvieron para cerrar relación con un buen puñado de jugadores con peso en Segunda. Joan Tomás se fue en 2013 y siguieron sus pasos en 2014 Carlos Bellvís, David Rodríguez, Toni Dovale y Andrés Túñez, aunque estos dos últimos más allá del mes de enero pero todavía en plena temporada (marzo y abril, respectivamente). Además, los canteranos Dani Abalo y Jonathan Vila buscaron minutos en sendas cesiones.

Llegó 2015, ya con Eduardo Berizzo en el banquillo, y no se produjo ningún movimiento hacia fuera en el mercado. Algo que sí sucedió en los otros dos cursos con el técnico argentino, incluso con dos traspasos: el no deseado de Augusto Fernández al Atlético en 2016 y el sí deseado de José Naranjo al Genk en 2017. Además, el primero de los años se fue cedido Levy Madinda y en el segundo, David Costas. Y se solventó el problema de disciplina con Fabián Orellana cediéndolo al Valencia con una opción de compra ya cerrada.

En enero de 2018, dos fueron los futbolistas que buscaron más minutos vía cesión: Andrew Hjulsager y John Guidetti. Este último se fue al Alavés con el traspaso también ya cerrado para el verano. En ese mes, así mismo, el Celta vio cómo dos de sus cedidos cambiaban de aires: el santiagués Álvaro Lemos y el belga Theo Bongonda.

Hace dos años, tres defensas protagonizaron las salidas invernales. Se fue Júnior Alonso, que había llegado cedido el verano anterior. Y se marcharon también bajo la misma fórmula Facundo Roncaglia y Robert Mazan.

Ya en 2020, hubo un poco de todo pero la operación estrella fue el traspaso de Stanislav Lobotka al Nápoles. Además, David Costas volvió a irse cedido y Emre Mor cambió el destino de su préstamo (de Galatasaray al Olympiakos). Por último, Claudio Beauvue rescindió su contrato en Vigo para fichar por el Deportivo.

Okay, el más 'vendible' entre los suplentes, interesa al West Bromwich

En el seno del Celta existen dos certezas. La primera, que su idea es liberar masa salarial con las salidas de David Costas, Jorge Sáenz y David Juncá. La segunda es que quizás haya que cambiar la primera. El reciente mercado de verano, ya en plena pandemia, demostró que los movimientos son contados y sin apenas dinero de por medio, Y que igual que el equipo vigués, todo el mundo va muy justo con el límite salarial, dada la disminución rotunda de ingresos. Por lo tanto, hay que tener en espera un plan B, que en el caso del club celeste es esperar por ofertas por sus jugadores.

En ese sentido, el más manido para este enero, por estar contando con menos minutos, tener más cartel a nivel internacional y suponer una ficha importante, es Okay Yokuslu. El deseo del club no es reducir número de futbolistas de los que pueda echar mano el técnico, Eduardo Coudet, pero el mercado irá marcando si se hace necesario tomar una decisión de este calibre.

Además, en Príncipe ya han recibido llamadas preguntando por la situación del internacional turco. Una de ellas, según avanzó el "Daily Mail" el pasado sábado, sería la del conjunto inglés West Bromwich Albion, que pelea por evitar el descenso en la Premier y quiere reforzarse con Okay en calidad de cedido.