El anhelado espíritu de Berizzo

Después de otro comienzo de temporada más que preocupante y del enésimo cambio de entrenador, el Celta quiere volver a creer en sus posibilidades. La plantilla busca referentes a los que agarrarse y ha encontrado uno en el estilo del nuevo técnico, Eduardo Coudet, que, según afirmó ayer Rubén Blanco, recuerda al del último preparador que triunfó con el equipo vigués, el también argentino Eduardo Berizzo.

Con el antiguo central celeste, el Celta encontró la estabilidad durante tres temporadas en las que llegó a disputar las semifinales de la Copa del Rey y de la Liga Europa, y en las que estuvo siempre en posiciones de la zona media y alta de la clasificación en la Liga.

"No me gusta comparar, pero desde que vino el nuevo míster, nos viene el recuerdo de una etapa muy bonita, que además fue no hace tanto, que fue la de Berizzo. Pero más allá de que quizás se asemeja un poco a lo que nos pedía Berizzo, creo que no tenemos que comparar. Al igual que cada jugador es cada jugador, cada entrenador es cada entrenador", destacó Rubén en una rueda de prensa virtual.

El portero mosense detalló algunos aspectos de esa semejanza que la plantilla celeste ha apreciado entre los métodos de Coudet y los de Eduardo Berizzo: "Llevamos pocos días entrenando con el míster, pero desde el primer momento nos pidió intensidad, que fuéramos valientes y que tuviéramos una idea clara. Es cierto que con el parón de selecciones faltan compañeros por venir, pero los primeros días de trabajo han sido buenos y yo me quedo con la idea de que nos pide que seamos muy intensos".

"Estamos trabajando mucho con balón, pero también estamos corriendo", añadió Rubén, que lamentó que se haya tenido que producir un cambio en el banquillo por los malos resultados del equipo: "Son cosas que suceden en el fútbol. A nadie nos gusta vivir situaciones de este estilo, pero han sucedido siempre y seguirán sucediendo. A los jugadores nos toca seguir trabajando, quizás mejor de lo que lo estábamos haciendo, y ser ambiciosos e intentar conseguir los tres puntos, que creo que es lo que nos está faltando este año".

Quizás el actual Celta no sea tan ambicioso como aquel de Berizzo, pero al menos sigue teniendo como referencia al argentino.

"Es difícil trabajar los penaltis"

Rubén Blanco no se ha caracterizado a lo largo de su carrera por ser un especialista en parar penaltis. De las treinta penas máximas que le han lanzado al guardameta del Celta en las diferentes competiciones en su carrera profesional, solamente cuatro no acabaron en el fondo de la portería. El resto, nada menos que 26, terminaron en gol para el conjunto rival.

Un excéltico, Charles Dias, fue el último que falló un penalti ante Rubén en la temporada 2018/19, en un Eibar-Celta que terminó 1-0 a favor del equipo de Mendilibar. Desde entonces, el meta celeste ha tenido que recoger el balón de su portería siempre que le han lanzado desde los once metros, la última vez en el encuentro de este mismo mes contra el Elche, en el que Fidel adelantó a su equipo. "(No pararlos) es algo que me fastidia, porque son momentos en los que el portero puede ayudar al equipo. Yo intento trabajarlo, aunque es realmente difícil porque no es algo fácil de trabajar, pero voy a hacer todo lo posible y lo que en esté en mi mano para poder ayudar al equipo en esos momentos", dijo ayer Rubén en la rueda de prensa.

El mosense habló también de su última lesión y explicó que "son situaciones que no se quieren vivir, pero también sirven para aprender cosas y en este caso, además, fue todo muy bien".