Alejandra del Burgo ficha por el Fatum Nyiregyhaza húngaro

Alejandra Álvarez del Burgo comenzará la próxima campaña una etapa profesional totalmente nueva para ella. Tras una extensa y exitosa trayectoria en la élite del voleibol español, primero en el Alcobendas y en los últimos cuatro años en el Olímpico de Gran Canaria, la colocadora viguesa afronta su primera experiencia en una competición extranjera. El destino elegido es Hungría y el equipo, el Fatum Nyiregyhaza de la Extraliga del país magiar. La canterana del Xuvenil firma por una temporada con un club que acaba de ser eliminado en los cuartos de final del play-off por el título en la competición doméstica -fue tercero en la fase regular- y que acumula en sus vitrinas seis ligas y nueve copas húngaras.

El salto es importante en cuanto al cambio de nivel de juego, pero también en lo que respecta al estilo de vida y a toda la incertidumbre que envuelve irse a vivir a un país distinto, con una lengua diferente, un clima opuesto y una cultura totalmente nueva en muchos sentidos. Sin embargo, Del Burgo está decidida. Hace ya algunos años que le ronda por la cabeza la idea de probar suerte en el extranjero. El momento es ahora, una vez cerrado el ciclo en Las Palmas de Gran Canaria, con la mezcla justa entre experiencia y juventud que le da sus 29 años.

En esa tesitura surgió la opción del Fatum, un equipo potente dentro de una liga de bastante nivel como la húngara. Tanto el club como el cuerpo técnico están encantados de contar con una de las mejores colocadoras de la Superliga en los últimos años. El proyecto deportivo es atractivo y el día a día allí, aunque muy distinto y a temperaturas radicalmente diferentes a las de Gran Canaria, es una experiencia interesante para vivir. Nyiregyhaza es una ciudad pequeña, de unos 120.000 habitantes, situada al norte de Hungría, cerca de las fronteras con Eslovaquia, Ucrania y Rumanía. En cuanto a la Liga, está compuesta por tan solo 8 escuadras, lo que eleva notablemente el nivel de competitividad. Solo hay que ver que el nuevo equipo de Del Burgo fue tercero en la fase regular y el pasado martes sucumbió en los cuartos de final del play-off por el título contra el sexto clasificado, que se llevó la serie por 3-1.

Así, Ale deja atrás cuatro años en el Olímpico. Este último se facturó sin títulos. Pero los otros tres fueron buenos. Especialmente, el curso 2023/24. La viguesa se va de Las Palmas con dos Ligas, una Copa de la Reina, dos Supercopas de España y una Supercopa Ibérica, a las que hay que sumar otra Copa en su último año Alcobendas. Ahora le toca seguir con su camino en el extranjero. Hungría la espera.

Con ofertas de Alemania, Francia y también para seguir en España

A nadie se le escapa la calidad de Alejandra del Burgo en el voleibol español tras una década en la élite y numerosas apariciones con la selección absoluta. Por eso, a la colocadora viguesa no le faltaron opciones para continuar compitiendo en la Superliga. Sin embargo, ése no era su deseo. Estaba determinada a probar el deporte y la vida en el extranjero y a abandonar España, siempre y cuando apareciesen escenarios atractivos. Y ese ha sido el caso. Así que solo quedaba elegir el destino. Finalmente, se inclinó por el Fatum y por Hungría. Pero tuvo la posibilidad de jugar, al menos, en otros dos países.

La canterana del Xuvenil de Teis dispuso de dos ofertas formales de Alemania y de Francia. El Postdam germano y el París galo se interesaron por ella, que meditó las propuestas en profundidad al tratarse de buenos equipos y de ligas potentes. Sin embargo, la opción magiar le sedujo más por una conjunción de aspectos. El próximo mes de agosto se incorporará a la pretemporada de su nueva etapa.