Varios vecinos de Barreiro amanecieron ayer con una desagradable sorpresa al encontrar a un hombre que parecía haber muerto en mitad del parque y tendido en el suelo. Los hechos tuvieron lugar minutos antes de las 10 horas, cuando algunos testigos llamaron a los servicios de emergencia 112 Galicia alertando de la presencia de una persona que podría haber muerto en la Avenida Ramón Nieto.
De inmediato trasladaron la información a emergencias sanitarias-061, la Policía Local y la Policía Nacional. Al llegar al lugar los sanitarios comprobaron si el hombre mantenía alguna constante vital y tras ser imposible reanimarlo confirmaron su muerte. El cuerpo corresponde al de un hombre de unos 39 años y pese a desconocerse las causas de la muerte, se baraja la posibilidad de que fuesen causas naturales. Por ello, además de a la Policía Nacional, dieron aviso también al Juzgado de Guardia.
El hallazgo se suma a la aparición de otro cuerpo en una finca en la calle Ribadavia a principios de mes, el mismo día que se encontraron unos restos óseos en la parroquia de Valladares, que podrían tratarse del cuerpo de un joven desaparecido en el año 2001 después de que se marchase de casa para dar un paseo. Junto al cadáver había algunos efectos personales.
Tercer cuerpo encontrado en lo que va de mes
Se trata del tercer cadáver encontrado en al vía pública viguesa en lo transcurrido del mes de septiembre. Precisamente los otros dos casos se notificaron la misma jornada, el día 6. Un particular encontró en la calle Ribadavia un cuerpo sin vida tendido en el suelo de una finca abandonada rodeado de jeringuillas. Se trataba de una mujer y las primeras pesquisas señalaron que el cuerpo podría llevar varios días en el lugar antes de que se encontrasen. Ese mismo día en Valladares se encontró unos restos óseos y el esqueleto mantenía algún resto de ropa, de un pantalón, y una pulsera con un nombre que coincidiría con el de un joven vigués al que se le perdió la vista hace 19 años y cuya desaparición se encontraba en los ficheros policiales: un joven vecino de Cabral, al que se le vio por última vez en septiembre de ese año, cuando tenía 29 años.
