Los pescadores de la lamprea serán Arbenses Distinguidos
La figura de los pescadores estará representada por Severo Alonso Simón, el pescador de mayor edad en la actualidad, y Generosa Tato Nicolao, única mujer que sigue en activo
Arbo ha decidido honrar a los pescadores del río Miño como Arbenses Distinguidos, destacando su papel en la preservación de una tradición centenaria vinculada a la pesca de la lamprea. Esta práctica, arraigada en la cultura local, forma parte del patrimonio inmaterial de la localidad y ha sido un pilar económico y social durante generaciones.
La Festa da Lamprea, que tiene sus raíces en la antigua actividad en las pesqueiras, sirve como tributo a un modo de vida que durante siglos sustentó a numerosas familias. Estas construcciones fluviales, situadas en los márgenes del Miño, siguen utilizándose con técnicas ancestrales para la captura de los ejemplares, manteniendo un método sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Según el alcalde Horacio Gil, la fama internacional de Arbo por la lamprea no se debe únicamente a su preparación culinaria, sino también al arte tradicional de su pesca. Los pescadores, conocedores de los hábitos de la especie, emplean conocimientos transmitidos de padres a hijos, siguiendo un calendario heredado que regula las temporadas de captura.
La labor de estos pescadores ha sido históricamente exigente. En épocas pasadas, trabajaban desde el amanecer hasta el anochecer, enfrentando condiciones adversas sin equipamiento moderno. Las pesqueiras no solo eran lugares de trabajo, sino también refugios donde guardaban herramientas y se resguardaban del frío. En décadas como los años cuarenta, cincuenta y sesenta, la abundancia de lamprea permitía capturas de más de 150 ejemplares en una sola jornada, consolidando además la técnica de la lamprea seca.
El consistorio arbense ha concedido este año el Arbense Distinguido, su máximo reconocimiento, a los pescadores y pescadoras por su contribución a la preservación de un legado que abarca dimensiones históricas, económicas y gastronómicas. Según Gil, su esfuerzo ha sido clave para mantener viva la identidad de Arbo y el valor del río Miño como eje de su desarrollo.
La figura de los pescadores estará representada por Severo Alonso Simón, el pescador de mayor edad en la actualidad, y Generosa Tato Nicolao, única mujer que sigue ejerciendo la profesión.
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