La oposición fuerza a una Comisión para tratar la traída de Vilaza
BNG y PP solicitan su celebración al lograr el quorum exigido, Ferreira asegura que la estrategia responde a "una manipulación"
La ansiada unanimidad que alcalde de Gondomar, Paco Ferreira, está pidiendo entre sus corporativos para sacar adelante el inicio del expediente de municipalización de la red de abastecimiento de Vilaza, no hace más que despertar desconfianzas entre los portavoces de la oposición. Tres días después de que el alcalde se hubiese comprometido a convocar una reunión de portavoces para llegar a una fórmula que convenza a todos los grupos, BNG y PP mueven ficha y fuerzan la celebración de una Comisión Informativa urgente tras presentar sendas peticiones de manera formal, superando así el mínimo de ediles exigido para que se lleve a cabo.
El primero en realizar la petición fue el grupo de los nacionalistas, ahora, dos días después de haberlo hecho público a través de un comunicado, los populares se suben al carro del mismo modo solicitando a su vez la presencia de técnicos municipales que garanticen el recorrido legal de cualquiera de los acuerdos que se pudiese llegar a adoptar de cara a la celebración del pleno del mes de octubre. Además, en su caso, mantienen que por el momento no tuvieron acceso a la documentación relacionada, poniendo al mismo tiempo en tela de juicio la legalidad de la proposición de los socialistas. “Tenemos claro que si estuviese 100% dentro de la ley, la solución ya estaría aprobada al contar con mayoría absoluta”, explican desde el PP.
El debate está servido, el alcalde por su parte no solo asegura que “hay constancia de que accedieron a los informes de la propuesta de municipalización”, sino que además manifestó que este cambio de tercio adoptado por ambos partidos, “es una manera de enredar lo acordado en el pleno”. Según aseguró, ayer mismo enviaron un escrito que indica que el gobierno local está a la espera de que se convoque una reunión una vez que tengan estudiados todos los escritos, sin que llegase a precisar si finalmente atenderá a la fórmula de la Comisión forzada, pese a que esta está retribuida con 180 euros por concejal y sesión, mientras que la de portavoces, por la que se inclina el regidor, es gratuita.
Contenido patrocinado
También te puede interesar