Dos meses de nivel europeo

Desde que el Celta rompió a ganar, pocos le siguen la estela. Porque la temporada liguera celeste se divide en dos mitades casi exactas de partidos, aunque no temporales, con tendencias claramente opuestas. Los tres primeros meses, sustanciados en las nueve primeras jornadas, situaban a los célticos décimo séptimos, lastrados por su incapacidad para sumar una sola victoria. Pero desde que el equipo pasó por El Sadar y, sin merecerlo en exceso, se llevó los tres puntos, las tornas han girado de manera más que cotundente en los dos últimos meses: ocho encuentros saldados con cinco victorias, un empate y, únicamente, dos derrotas ante los dos conjuntos barceloneses. De ser el décimo séptimo en ese primer tramo de empates, a ser el quinto mejor conjunto desde que rompió a ganar.

En este periodo de tiempo, el bloque vigués y sus 16 puntos sólo se ven mejorados por dos de los tres gigantes -sin tener en cuenta la jornada ya adelantada-, el poderoso Villarreal y el sorprendente Espanyol. Barcelona -uno de los dos que superaron a los célticos en esta fase- y Atlético mantienen un mano a mano de 21 puntos y son los únicos claramente superiores a los célticos. Porque el conjunto castellonense -cierto que con un duelo menos- y el espanyolista sumaron 18 puntos. Por detrás queda todo un Real Madrid (15) y conjuntos de tronío como el Betis (12) o la Real Sociedad (11).

La mezcla entre las dos mitades de la temporada celeste paren su actual presente: séptimo clasificado con 8 puntos de margen sobre las plazas de descenso y a cinco de la sexta, la primera con premio continental asegurado. Y atesorando ya 23 puntos cuando todavía restan dos encuentros más para cerrar la primera vuelta: la visita a Balaídos del Valencia y el paso por el Sánchez Pizjuán, donde empezó todo para Claudio Giráldez, para medirse al Sevilla. Creciendo desde que rompió a ganar.