Lara Martínez, capitana de As Celtas: “Hace dos meses no creeríamos todo lo que nos está pasando”

Lara Martínez (Vigo, 2000), capitana y centrocampista de As Celtas, es una de las jugadoras que formaron el once inicial del primer equipo femenino del club celeste en el histórico estreno del pasado sábado en Balaídos, un encuentro que congregó a más de 6.500 aficionados en las gradas y que se convirtió en una fiesta del celtismo, adornada con los tres puntos sumados ante el Victoria CF coruñés.

Ya han pasado unos días desde el histórico debut de As Celtas en Balaídos, ¿qué sensaciones le quedan?

Pues creo que seguimos todas en una nube aún. Fue un día histórico en el que la afición respondió de diez y todavía estamos asimilando lo vivido, disfrutando de ello y mirando ya al siguiente partido porque al final estamos en la liga y hay que competir.

Nada menos que 6.534 espectadores en las gradas, ¿esperaban que hubiera tanto público y que además se pasaran todo el partido animando como sucedió?

Yo creo que no. Esperábamos gente, pero no tanta. No pararon de animar durante los noventa minutos y es que 6.500 personas es una locura. Ya se vio en Riazor, que es Primera División y había poco más de siete mil, y nosotras estamos en Tercera Federación y no hay tanta diferencia. El celtismo respondió de diez.

¿Qué supone para el equipo jugar ese primer partido ante tantas personas?

Creo que es algo que ninguna de nosotras había vivido hasta ese momento, algo histórico, porque es el primer partido oficial de As Celtas y encima en Balaídos, que la gran mayoría de nosotras, por no decir todas, somos celtistas. Son sueños cumplidos, algo histórico.

¿Se adaptaron bien al campo, teniendo en cuenta que habitualmente juegan en terrenos de juego más pequeños y de hierba artificial?

Al principio nos costó el tema de los espacios. Se nos hacía más largo de lo normal, pero creo que en la segunda parte ajustamos bastante bien y nos pudo ayudar porque, como ya he dicho, Toubes e Irene son aviones y al espacio hacían mucho daño.

¿Les gustaría seguir jugando en Balaídos o se hace excesivamente grande para disputar todos los partidos allí?

Sí, sí. Siempre que quieran, estaremos encantadas de jugar en Balaídos. Lo que pasa es que es mucho tute para el campo. Nosotras estaríamos encantadas, lógicamente, pero sabemos que tenemos que jugar en A Madroa y cuando nos den de nuevo la oportunidad, la aprovecharemos.

En cuanto al partido, les costó bastante marcar el primer gol.

Sí. Nos costaba llegar al área, sobre todo. Porque tuvimos bastantes oportunidades, especialmente con centros laterales, pero no llegábamos del todo al área. Eran centros que se paseaban, que no encontraban remate, y son cosas que hay que corregir para el siguiente partido. Sobre todo, las distancias. Se nos hacía más complicado llegar porque el campo era más grande. Pero estamos corrigiéndolo y espero que para el próximo encuentro las oportunidades que tengamos, por lo menos las finalicemos.

¿Quizás pesaron los nervios al principio por ser el primer partido y jugarlo en Balaídos y ante tanta gente? Porque a medida que transcurría el partido se vio que el equipo se entonaba cada vez más.

Sí. Creo que fue cuestión de los primeros minutos. Luego te metes en el partido y prácticamente no te enteras de nada. Sí que escuchabas a la gente animar y tú con la cabeza estás cantando también, pero una vez que te centras en el partido se te van pasando los nervios y te centras en jugar, que es lo que hacemos en cada encuentro. Y creo que se vio sobre todo en la segunda parte, que el equipo estaba con mucha más calma y las cosas salieron mejor.

El sistema que emplearon en ese primer encuentro fue un 4-2-3-1, si no me equivoco.

Sí. Empezamos 4-1-4-1, luego cambiamos al 4-2-3-1, volvimos a cambiar… Variaba en función del rival y en cómo nos sintiéramos nosotras por el campo: por tapar espacios y por dar soluciones a las compañeras con balón. Pero, en principio, salimos 4-1-4-1.

¿Son los sistemas que van a utilizar durante la campaña?

Sí. Son un poco los que marca el Celta en su estructura. Todos los equipos utilizan 4-1-4-1 o 4-2-3-1 y nosotras pertenecemos al Celta, así que supongo que seguiremos en esa línea.

En el apartado individual, ¿cómo se vio en ese primer encuentro?

Bueno. Era mi tercer partido después de una lesión muy larga y aún me falta coger mucho ritmo. Con balón cada vez me noto mejor, pero aún estoy un poco torpe, y me tengo que dar tiempo a mí misma para coger confianza, ir volviendo a coger sensaciones con balón y sin balón para regresar al cien por cien.

¿Ve mucho margen de mejora en este equipo?

Sí. Acabamos de empezar. Llevamos un mes, no nos conocemos bien aún, cada jugadora viene de su casa… Todavía tenemos que encontrar ese ‘feeling’ jugando porque en el vestuario existe, pero hay que encontrarlo en el campo. Saber dónde está tu compañera sin mirar es algo que lleva un proceso y nosotras aún estamos asimilando los conceptos del cuerpo técnico, que son maravillosos, pero como digo llevamos sólo un mes y hay que seguir trabajando poco a poco.

Después de la primera jornada, están los tres equipos del área de Vigo -As Celtas, Sárdoma y Lóstrego- empatados a puntos en lo más alto, ¿cree que será así toda la temporada o habrá más diferencias?

Es la primera jornada y creo que aún no se puede decir qué equipos van a estar arriba y cuales van a estar abajo porque la liga es muy larga. Pienso que va a haber más equipos que estarán luchando por estar en la zona alta y que no ganaron el primer partido, y los que van a estar arriba van a ser los más regulares. Intentaremos estar ahí nosotras y luchar por lo que venga.

El próximo rival es el Bergantiños, que viene de perder 5-0 en León, ¿cómo afrontan este encuentro?

Como uno más. Al final, es un partido de liga que tienes que jugar, que tienes que competir y que vamos a intentar ganar. Es verdad que vienen de perder 5-0, pero pudieron tener un mal día. Tenemos que plantearlo como si fuera un rival que viniera de ganar e ir a por los tres puntos. De ellas sabemos que es un equipo recién ascendido, pero eso no quiere decir nada.

Desde el club se están volcando especialmente con As Celtas, ¿qué le parece la iniciativa de dar una acreditación de asistencia al primer partido a quienes lo soliciten?

Me parece una auténtica locura. Creo que si nos lo dicen hace dos meses, cuando empezamos a entrenar, no nos lo creeríamos ni de broma. El celtismo respondió de diez y el club respondió de diez, porque no es lo mismo hacer sólo el equipo que darle también los medios y nosotras tenemos esos medios. Tenemos que agradecer tanto al club como a la afición la respuesta que nos están dando.

Hasta un himno propio les han hecho, “Xa están aquí”, ¿les gusta la versión de la canción de Os Resentidos?

Nos lo dijeron una semana antes de que saliera y no nos lo creíamos. Está súper guay. La disfrutamos tanto cuando nos la pusieron como cuando estuvimos haciendo el vídeo. Y ahora, de hecho, se canta en el vestuario (risas).

Fue muy bonito la dedicatoria de la victoria a las dos jugadoras lesionadas de larga duración. Se ve que hay un grupo muy unido.

Sí. El grupo es de diez. Creo que nos llevamos entre todas genial. No hay una persona que digas ‘me puede caer mejor o peor’. Somos un grupo súper unido, cada dos por tres estamos haciendo cosas para quedar, actividades en grupo, y la verdad es que eso se refleja tanto fuera como dentro del campo.