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Uno imagina que Claudio Giráldez y Miguel Ángel Sánchez ‘Míchel’, entrenadores de Celta y Girona respectivamente, se admiran desde lejos mutuamente. Incluso, pueso a imaginar, pues supone que se llevarán muy bien personalmente. Ejercicio de imaginación basado, única y exclusivamente, en su gusto futbolístico dirigiendo equipos, ése que hoy los aficionados celestes pretenden disfrutar en el duelo entre ambos a la hora de la comida.
El Girona voló tan alto la pasada temporada que todavía planea. Aunque sólo sea -que no lo es- porque milita en la Liga de Campeones. Ha perdido grandes nombres que deslumbraron el pasado curso -Sávio o Dovnyk, principalmente- pero mantiene su idea de juego y una capacidad combinativa que llama la atención. Ésa que echará un pulso con el gusto celeste por ese mismo aspecto de juego este mediodía en Balaídos.
En el Celta, las buenas sensaciones siguen superando a las malas. Cuestión trascendente cuando vienes de perder los dos últimos partidos, las dos primeras citas de una semana que se prometía exigente con los europeos Athletic, Atlético y Girona. Haber digerido bien los dos primeros capítulos, tanto en lo físico como en lo mental, será la primera clave de cara al encuentro de hoy, al que el Girona tampoco llega sobrado, al haber encadenado tres encuentros sin perder: dos derrotas ante Barcelona y Valencia y un empate en casa con el Rayo. De hecho, tiene un punto menos que los célticos.
En Mos, los dos últimos días han sido de control de daños en el aspecto físico. La buena noticia es la recuperación de Óscar Mingueza, que vuelve a la convocatoria y, previsiblemente, al once inicial. La mala es que, a las ausencias ya arrastradas de Mihailo Ristic y Luca de la Torre, se une para este partido Jonathan Bamba. Además, Claudio Giráldez, técnico celeste, habló ayer de molestias de Carl Starfelt y Borja Iglesias, por ejemplo.
Esa incomodidades pueden llevar al entrenador céltico a mover su once con jugadores menos habituales, aunque que ya han estado en él. Asoman la cabeza jugadores más frescos como Carlos Domínguez, Anastasios Douvikas, Javi Rodríguez, Alfon González o Pablo Durán. Atrás, el pie de Jailson Marques apunta a volver y en uno de los carriles estará Mingueza, mientras que en el otro puede tener continuidad Sergio Carreira. Y en el centro, Damián Rodríguez espera regresar. Podrían darse descansos de esos llamativos, como el de Iago Aspas.
Sería en su partido número 501 de celeste. Por el 500, será el protagonista en la previa del partido. Balaídos lo loará.
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