Cartas al director

Los escraches

Entramos en una dinámica en la que este tipo de actuaciones deja de ser algo recomendado. En su día era “jarabe democrático”, pero ahora, como los destinatarios que merecen el reproche del pueblo son los populistas que quieren acabar con España, ya no creen conveniente el escrache. Antes era saludable apalear a un policía tumbado en el suelo, visitar el domicilio de los políticos y acosar a toda su familia, boicotear intervenciones públicas, impedir determinados actos, azotar a periodistas hasta sangrar, etc. Ahora debería castigarse a todo aquel que ose hacer lo mismo contra la radical izquierda bolivariana que quiere destruir nuestra nación y nuestro estado del bienestar. Esta es la igualdad que te prometen estos déspotas.
Lloraba desconsolado nuestro Vicepresidente 2º del gobierno, el inventor de los escraches, por haber encontrado en el suelo una pintada que decía “coletas rata”. En primer lugar, ¿por qué se da por aludido con esta mofa? En segundo lugar, de tomarlo como insulto hacia su persona, ¿no acababa de decir que había que naturalizar el insulto? Aclárate Pablo, sí o sí.
Pero la cosa va a más. Se quejan ahora de que haya escraches, ¡válgame Dios!, pero su secretario de organización, Alberto Rodríguez, está amenazando con hacer lo propio a otras personas, como al mismo Rey, a Florentino Pérez o a Ana Rosa Quintana. Y es curioso, ahora no llora Pablo Iglesias. Es decir, a otros sí, pero a mí no.
Pedro, ¿por dónde te tiene agarrado Pablo?