Atlántico
Gaza: ¿Olvidada?
En el planeta hace meses que sobrepasamos los 8.000 millones de habitantes. Es una situación sin precedentes históricos.
Cabe preguntarse si ¿Los modelos económicos y sociales existentes siguen siendo válidos?
La humanidad necesita un cambio estructural en el modelo económico global, si quiere abordar los desafíos a los que nos enfrentamos los ciudadanos del planeta. Algunos de estos cambios serían:
Abandonar el enfoque exclusivo en el crecimiento económico, así como la maximización de beneficios financieros.
También, adoptar un modelo centrado en garantizar la calidad de vida de todas las personas y la protección de los ecosistemas.
Necesitamos una transición hacia energías limpias y sostenibles, sustituyendo los combustibles fósiles por energías renovables como la solar, eólica o hidroeléctrica.
El consumo y la producción, deben de ser responsables, reduciendo el desperdicio de recursos, implementando una economía circular con materiales que sean reutilizados y se reciclen continuamente.
Las desigualdades deben de ser reducidas, a fin de garantizar una distribución más equitativa de los recursos y la riqueza.
Ello nos lleva, a un nuevo contrato social global, replanteando las relaciones entre gobiernos, a fin de priorizar la cooperación y la sostenibilidad.
El siglo XX vivió un escenario de ideologías que, hoy, no caben en los retos que la humanidad que tenemos ante los cambios medioambientales y la población que habita en el planeta Tierra.
Precisamos de impulsos nuevos, que provengan de propuestas a la sociedad encaminadas a la sostenibilidad de los recursos y de la vida humana.
John F. Kennedy dijo una vez: “No preguntes qué puede hacer tu país por ti, pregunta qué puedes hacer tú por tú país”. Hoy podríamos parafrasearlo: ¿Qué puedes hacer tú por la sostenibilidad del planeta? El cambio comienza en cada uno de nosotros, pero depende de realizarlo todos juntos.
Pedro Marín Usón. (Zaragoza)
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