La Fundación Coral Casablanca aumenta con una sexta agrupación, el coro de mujeres, dirigido por Lucila Pestana, bajo el nombre de Concepción Arenal: “Surgió con la idea de agrandar la familia, tiene una sonoridad diferente, un color musical peculiar; es otra pincelada al gran cuadro que es la Fundación”.
Integrado por 30 coralistas lleva seis meses ensayando, buscando una personalidad propia, tal y como explica su directora. “Está siendo muy satisfactorio en todos los sentidos, las participantes estamos unidas por la pasión de querer compartir lo que llevamos dentro a través de la música”. Asegura que sus “niñas”, como llama las integrantes “tienen mucho que ofrecer”.
Cubana de nacimiento, hija de artista (Félix Pestana) y hermana de músico, lleva diez años como pianista acompañante de la Coral Casablanca, donde afirma “aprendí que la constancia es fundamental, el trabajo continuo y las ganas de mejorar llevará a la formación a tener su sonido”.
Apenas sin publicidad, en poco tiempo lograron reunir a 30 mujeres con ganas de cantar. No forman parte de la Coral principal, aunque algunas estuvieron ligadas a ella hace años. “Queríamos abrir el coro a gente nueva, de la calle y aunque hago una audición previa, no hay ningún requisito especial, mejor si sabe leer música, pero con que afine y tenga una correcta educación auditiva es suficiente. Creo que el oído es educable, pero requiere un tipo de trabajo que va más allá del que podemos hacer en el coro”.
El perfil de las coralista es variado. “Lo que me interesa son las voces claras, sin dañar, y eso puede corresponder a cualquier edad”. Para Lucila Pestana, la música equivale a colores, brillos y tonalidades. “Comencé a estudiar piano a los 8 años. Recuerdo que en mi casa siempre había música, a mi padre le encantaba pintar con ella; sobre todo disfrutaba trabajando en el taller mientras yo prácticaba”.
Aún está conformando el programa más adecuado. Busca piezas para coros pequeños y para voces femeninas. “Me fascina la música sacra, pero no vamos a hacer un repertorio exclusivo con estos temas, también quiero incorporar composiciones más actuales”.
Durante estos meses, juegan con la música, innovan y se conocen. “Es una forma de encontrarnos. La gente llega con sus problemas y preocupaciones, pero en la hora y media que dura el ensayo, desconectan, es increíble la implicación que tienen, todas respiramos a la vez; me pode la piel de gallina”.
A la directora no le gusta hablar de fechas, pero reconoce que “es importante trabajar con metas”. La suya es el 8 de marzo. El objetivo es que el coro Concepción Arenal ofrezca su concierto inaugural el Día de la Mujer. Para Pestana, la tradición coral de Vigo está detrás de la buena aceptación que tuvo la nueva agrupación. “Solo con el boca a boca se reunieron las 30 integrantes y aún hoy (por ayer) recibimos dos solicitudes de ingreso a través del correo de la Fundación ([email protected])”.
La Fundación Coral Casablanca (con la propia Coral y los coros Geppetto, el infantil, el juvenil y el Sonidos de la Memoria, dirigidos por Óscar Villar) mantiene abierta la posibilidad de seguir creciendo con un futuro coro de Voces Graves.
