En Vigo no hay ya ni un metro de suelo contaminado, según ha señalado de forma expresa la Consellería de Medio Ambiente en un informe favorable sobre el Plan General de Ordenación Municipal. Dicho Plan acaba de superar la fase de alegaciones y comienza la más compleja, en la que el Concello necesita el visto bueno de al menos una treintena de organismos públicos. Uno de ellos, Medio Ambiente de la Xunta, ya ha examinado el documento y dictaminado que en el municipio vigués no hay suelo polucionado. Y eso tiene relevancia porque hace 27 años se cerró el basurero del Zondal, sellado entre 1994 y 1995 gracias a la entrada de Vigo en el Plan Sogama y la apertura de planta de transferencia de Guixar, que desde entonces se encarga con todo éxito de gestionar los residuos de la ciudad: en Vigo no hay basura desde hace casi 30 años, cuando se dejó de acumular en un espacio que alcanzó el centenar de metros de altura, con riesgo de desplome, como advirtió el Gobierno de entonces al ayuntamiento. También se lo dijo al Concello de A Coruña, y en efecto unos años después así fue, en Bens, provocando el fallecimiento de una persona.
El visto bueno del departamento ambiental del Gobierno gallego señala precisamente a dicho punto, O Zondal, en Valadares, donde el nuevo PGOM contempla por fin la reutilización del espacio al entender que se encuentra en condiciones para ello. O siendo más precisos, se van a dar las condiciones a corto plazo. En su informe, la Consellería de Medio Ambiente señala que el Plan prevé implantar en la zona una nueva área dotacional-deportiva que ocuparía los terrenos del vertedero. En este sentido, la Dirección Xeral de Calidade Ambiental recuerda al Concello que tienen que pasar al menos 30 años antes del uso del terreno y que los posibles cambios de uso que se hagan deberán ser aprobados por el órgano competente de la Administración gallega. En este caso en concreto, será necesario adoptar todas las medidas para que en el desarrollo de nuevas utilizaciones sobre la superficie del Zondal se garantice la protección del ambiente y la seguridad y salud de las personas. Entre otras posibles medidas se citan de forma expresa la realización de un estudio geológico en el que se analice la estabilidad de los terrenos.
Metros de piedras, plásticos y otros materiales sellaron O Zondal en 1995 al comenzar a funcionar la planta de Guixar, en lo que supuso un cambio histórico y radical para Vigo, primera ciudad gallega en librarse de sus residuos, desde entonces enviados a Cerceda para su valorización. No obstante, no se habrá completado todo hasta que el entorno del monte Alba esté en condiciones de ser utilizado sin peligro. La chimenea que quemaba gas ha dejado de emitir pero continúa la prohibición. Las analíticas indican que cada vez "hay menos actividad debajo" del prado.
Cultura informa negativamente el PGOM y exige mayores protecciones en los bienes
El nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) en tramitación recibió los dos primeros informes, vinculantes, ambos desde la Administración autonómica y con reusltados contrarios: Medio Ambiente dio vía libre al texto, aunque hace algunas consideraciones, en tanto que desde Cultura llegó el primer dictamen negativo, lo que exigirá la modificación del documento urbanístico al tratarse de una declaración preceptiva y vinculante. En concreto, la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de Galicia (DXPC) formula discrepancias técnicas por falta de adaptación del planeamento a la legislación sectorial e informa desfavorablemente la parte patrimonial-cultural del PGOM. Considera que no garantiza la correcta conservación de los bienes patrimoniales del término municipal al no recoger algunas de las indicaciones hechas por este organismo en sus informes de 2018 y 2020 y por no cumplir con la Ley del Patrimonio Cultural de Galicia. Entre las cuestiones más destacables en su informe negativo señala cinco, que tendrán que ser modificadas para conseguir vía libre. Todo el proceso se alargará en todo caso durante este año.
-Prospección arqueológica. Señala la DXPC la necesidad de contar con una prospección arqueológica que permita conocer la totalidad de los bienes del patrimonio cultural vigués para poder protegerlos. Estos trabajos, segundo señalan los técnicos en el informe, “son precisos para establecer con seguridad su localización y evaluar los posibles impactos de las ordenaciones propuestas sobre ellos” que “deberá modificarse en función de los resultados”.
-Catálogo de bienes incompleto. Patrimonio señala discrepancias técnicas relativas al catálogo de bienes cuyas fichas no contemplan todos los datos exigidos en la Ley autonómica de patrimonio cultural. Es el caso de bienes de interés cultural como la Colegiata, elementos del Conjunto Histórico de Vigo, el Parque de Quiñones de León o los pazos de Valadares y Pastora.
-Deben revisarse los niveles de protección asignados a diversos elementos de los bienes de la arquitectura civil y residencial a los que en la mayoría de los casos se les atribuye una protección insuficiente para garantizar el mantenimiento de características esenciales y de los aspectos estructurales, constructivos, formales, volumétricos, espaciales y funcionales que definen la estos bienes.
-Necesidad de establecer un régimen transitorio para el Plan Especial de Edificios a Conservar, aprobado antes de la entrada en vigor de la Ley de Patrimonio Cultural y que debe garantizar la protección preventiva de los edificios no catalogados mientras no se amplía el catálogo. Esta cuestión no se tiene en cuenta en el texto del actual PGOM pese a ser reiterada en dos ocasiones por la DXPC.
-Falta de concreción sobre edificaciones y bienes del patrimonio etnográfico que no cuentan con una revisión exhaustiva sobre su estado ni de las limitaciones para adaptarse la normativa autonómica de patrimonio cultural.
