El alcalde propone que el Ministerio de Fomento asuma la propuesta y la obra en el nudo de Buenos Aires
El Concello de Vigo ha decidido retomar una vez más la histórica propuesta de que el tramo final de la Autopista del Atlántico (AP-9), desde Teis hasta el centro, se convierta en un vial más de la ciudad y pueda utilizarse como circunvalación. La propuesta, que ayer presentó el alcalde Abel Caballero, pasaría por la cesión de la titularidad de un tramo de la AP-9, desde la salida a la Avenida de Buenos Aires hasta el centro de la ciudad, para que este recorrido pase a ser "urbano" y "gratuito". Dicha actuación estaría ligada a la transferencia de la autopista a la Comunidad Autónoma, como reclamó esta semana por unanimidad el Parlamento gallego.
Para desarrollar esta iniciativa sería necesaria la construcción de dos glorietas en la entrada del mencionado vial; unas actuaciones que, según Caballero, deberán ser asumidas por el Ministerio de Fomento, aunque también remitirá la idea a la Xunta. Se trataría de construir un nudo con al menos dos glorietas en la calle Buenos Aires que permita todos los movimientos de entrada y salida.
El alcalde trasladará la propuesta a los gobiernos central y autonómico con la convicción de que esta actuación, "que no será agresiva con el entorno", resuelva problemas de acceso al puerto, mejore la circulación de Sanjurjo Badía y, por tanto, beneficie a la economía y la industria de la ciudad.
En su opinión, la infraestructuras tendría que asumirla el Ministerio de Fomento al tratarse de una circunvalación. Recordó que Fomento ya había construido en su momento la VG-20 (el Cinturción de Vigo, incluyendo el tramo que discurre desde el polígono de Navia hasta Bouzas), así como el vial conocido como Arquitecto Palacios, desde Castrelos hasta la avenida de Madrid, y también el nudo de Isaac Peral, conectado desde hace unos años con la red local a través del túnel de Beiramar, por el interior del territorio portuario.
A favor de la reclamación viguesa juega que en ninguna otra ciudad gallega por donde pasa la AP-9 el tramo urbano es de pago: ni en Pontevedra, ni en Santiago, ni tampoco en A Coruña, ya que la autopista se queda en las afueras y los últimos kilómetros son por completo urbanos.
La propuesta lanzada ayer ya fue planteada por Lois Castrillo siendo alcalde de Vigo, pero Audasa se negó al entender que afectaría al tráfico de la autopista. También se contemplaba una rotonda para redirigir la circulación a la altura de Buenos Aires, como ahora, utilizando además un vial secundario para ampliar los movimientos por el entorno. n
