La promoción de Marqués de Valladares, en obras, dispondrá de un acceso público por la Alameda para poder conocer el yacimiento romano más interesante
La empresa Avantespacia avanza con su promoción inmobiliaria entre Marqués de Valladares y Colón, en un caso con la rehabilitación de un edificio ya existente, el Ribas, racionalista, y en otro con la construcción de un sólido sobre una parcela que lleva años vacante tras haberse localizado otro yacimiento arqueológico. Como es conocido, hace más de veinte años que durante una excavación se encontraron depósitos del siglo I, probablemente de una factoría romana ligada con las salinas vecinas de Areal, con cubetas, depósitos y todo un complejo preindustrial ligado al mar, quizá el hallazgo de mayor importancia de Vigo. ¿Cómo conseguir que se pueda construir el edificio previsto y se conserven los restos, muy importantes? Ese problema no ha tenido solución hasta ahora, y quizá sea aún parcial. La promotora cedió el terreno arqueológico para que el edificio tenga una entrada propia y un acceso específico para poder ver los restos musealizados, como en otras ciudades. Sería algo similar al centro Salinae, de Rosalía, aunque en otras condiciones.
Una cuestión añadida es qué Administración se haría cargo de la operación. Para ello hay que remitirse al convenio firmado en octubre de 2007, en el que el Concello considera prioritario la conservación de los restos arqueológicos, siendo al mismo tiempo posible compatibilizar el mantenimiento de los hallazgos con el desarrollo urbanístico de la parcela. Por el mismo, la promotora -que era la anterior a la actual, que se hizo con los derechos- aceptaba ceder gratuitamente al ayuntamiento la titularidad de la porción del solar en el que se hizo el hallazgo, “permitiendo su conservación in situ -sin mover las piezas- dentro de un marco del protocolo suscrito entre Concello y Consellería de Cultura”. Son 227 metros cuadrados. La promotora a cambio aumentaría ligeramente sus posibilidades edificatorias a seis plantas. El acuerdo final parece claro: los terrenos pasan a manos del Concello, que tendría que garantizar el acceso público a la zona arqueológica a través de la plaza de Compostela, por ser inviable a través de Marqués de Valladares. Cultura correría con los gastos derivados de la musealización del yacimiento arqueológico, incluyendo los costes de ejecución de la estructura exterior de protección en la porción del solar objeto de cesión y en el tratamiento de los restos y su completa habilitación interior como museo de acceso público.
El arqueólogo Juan Castro participó en la excavación de Marqués de Valladares. Según explicó entonces a este diario, no estaba nada claro si los depósitos hallados eran para elaborar garum, la salsa romana con pescado y sal "No hay seguridad, salazón de pescado sí, y es probable que también hubiera producción". Explicó que en Cádiz y Tarifa, donde hay fábricas de salazones, se quedaron alucinados con el tamaño de las piletas y la zona industrial viguesa. Las rías eran fértiles, traían nuevas técnicas. "Con el volumen y lo que sabemos de las factorías localizadas confirmamos una actividad industrial", dijo. En el último tramo de Rosalía también aparecieron grandes depósitos con decantación y tanques.
