Turistas en Vigo que dan positivo en alcoholemias bloquean los juzgados

La avalancha de visitantes a Vigo desde que comenzó oficialmente la Navidad con el encendido de las luces se está dejando notar en el funcionamiento de los juzgados de guardia. Buena parte de los delitos por conducción alcohólica, los más comunes durante los fines de semana, se están quedando bloqueados sin poder resolverse de forma ágil debido a que los implicados son precisamente turistas de paso.

Según fuentes judiciales, los investigados, que han sido “cazados” bien por la Policía Local, bien por la Guardia Civil en las carreteras de Nigrán, Baiona o Gondomar, al volante habiendo ingerido alcohol en límites superiores a los administrativos, eluden su comparecencia obligada al día siguiente en el juzgado de guardia.

Estas causas se ventilan en su mayoría mediante juicio rápido, una vista por conformidad en la que el conductor reconoce los hechos y consigue una rebaja en la pena que como mínimo será de trabajos en beneficio de la comunidad o multas de seis a doce meses (a razón de tres o seis euros al día) y en todo caso con prohibición de conducir vehículos a motor entre uno y cuatro años. De no reconocer los hechos en 15 días tendría que celebrarse un juicio. Para que sea delito y no una sanción administrativa, la tasa de alcohol debe ser superior a 0,60 miligramos por litro, hay que recordar que el máximo permitido está en 0,25 mg/l.

Entre los conductores se encuentran visitantes de otros puntos de España, entre ellos por ejemplo Sevilla, y también de Portugal. Estas incomparecencias están generando problemas en los juzgados de Vigo, obligados a remitir nuevas notificaciones para juicio, ya que al no presentarse el aludido no puede dar su consentimiento a una vista por conformidad. La situación se complica todavía más con el país vecino, donde sería necesario incluso un exhorto para un asunto en principio menor.

Nueve conductores ebrios o drogados el fin de semana

Durante el pasado fin de semana, la Policía Local detectó a un total de nueve conductores al volante tras haber ingerido bebidas alcohólicas o haber consumido drogas. Según informaron fuentes del cuerpo municipal, en concreto fueron cinco los que dieron positivo en alcohol, aunque todos ellos en niveles inferiores a los 0,60 mg/l y cuatro en tóxicos. De los controles realizados, fueron siete los test de alcoholemia realizados, de los que solo dos se libraron de una sanción al dar negativo.

En cuanto a los narcotest, se realizaron cuatro y los cuatro dieron positivo. Estas pruebas no detectan, a diferencia del alcohol, la cantidad de droga que hay en el organismo sino simplemente si se han consumido. Si se detecta drogas en el organismo llevará consigo multas de hasta 1.000 euros en el peor de los casos y pérdida de seis puntos del carné y se conduce bajo sus efectos, el conductor deberá acudir al juzgado de guardia. Este procedimiento lleva aparejado la presencia de abogado y procurador para un juicio rápido, como en el caso del alcohol.