La toponimia más extraña

En el entorno de Vigo se puede pasear por el barrio del Cairo, entrar en las viviendas de Corea o atreverse con la subida a Japón. Son algunos de los nombres, oficiales u oficiosos, que se encuentran en las proximidades de la ciudad y que llaman la atención por su sonoridad o por referirse a lejanos lugares que nada tienen que ver con Galicia.

Cairo –que en gallego quiere decir colmillo, probablemente de ahí venga su nombre y no de la capital de Egipto- se halla en el municipio de Redondela, cerca de la estación del ferrocarril.

No muy lejos se encuentra Japón, en Chapela, cuyo origen es una incógnita, y que cuenta con algunas de las cuentas más pronunciadas de toda Galicia: una de ellas, que conduce hacia A Madroa, tiene una pendiente imposible.

En cambio sí se sabe que Corea, en Cabral, tiene que ver con la fecha de la construcción de lo que en los años cincuenta, en plena guerra en Extremo Oriente, se denominaba "edificios sindicales", que los vecinos consideraban un foco de problemas como Corea. Por el mismo motivo, otro grupo sindical de la misma época, éste en Teis, se quedó para siempre como "Wichita", en recuerdo de la famosa ciudad sin ley del Oeste americano.

En el mismo barrio vigués se puede localizar en las cartas náuticas como nombre oficial la Peña do Cabrón, ante la playa de A Lagoa, al pie del monte de A Guía, que así se denomina al parecer por su peligrosidad que supone para la navegación.

Claro que en el apartado marítimo hay una larga lista de nombres llamativos por su sonoridad, como Punta Cagadoiro, en el municipio de Bueu, en un extremo del Morrazo, no muy lejos de las rocas Carallóns, situadas en el archipiélago de las Cíes.

Mucho más lejos, en el municipio de A Guarda, frente al Atlántico y cerca de la desembocadura del Miño, se halla la playa de Fedorento, quizá el menos apropiado para un arenal.

En cambio, más afortunados estuvieron en Nigrán al bautizar como América la mayor de sus playas con la idea de darle proyección internacional. La marca ha quedado aunque oficialmente se llama Areal de Lourido.

Igualmente extraño resulta que un río de Moaña, que desemboca en la principal playa del municipio, A Xunqueira, sea O Inferno.

Mucho más lejos, cerca de Santiago, se encuentra en el municipio de Negreira la aldea de Ceilán, cuyo nombre evoca el país ahora conocido como Sri Lanka. Al parecer, existe una conexión: Ceilán se nombró por los marineros portugueses.

Claro que en materia de topónimos inapropiados se lleva la palma la antigua frontera ourensana de Feces –de Abaixo y de Arriba- cuya traducción resulta terrible. n