Toda una vida juntos en Coruxo

La iglesia románica de Coruxo acogió la renovación de los votos a los que acudió la delegada de la Xunta, Marta Fernández Tapias.
photo_camera La iglesia románica de Coruxo acogió la renovación de los votos a los que acudió la delegada de la Xunta, Marta Fernández Tapias.
La asociación Avoa homenajeó a los matrimonios de la parroquia que celebraron sus bodas de Oro y de Diamante

El secreto para durar muchos años con una misma persona está en la paciencia, el respeto y el cariño. Así de claro lo tienen las seis parejas que ayer fueron homenajeadas por la asociación de jubilados y pensionistas Avoa de Coruxo por ser los matrimonios más longevos de la parroquia. Luisa Comesaña y Francisco Estors, Marina Lago y Enrique Salgueiro y Maribel Bao y Jacinto Cea renovaron sus votos tras 50 años de casados en las Bodas de Oro. Pilar do Peso y José Pérez; Maximino Comesaña y Amelina Pérez y Francisco Rodríguez y Florinda hicieron lo propio por sus Bodas de Diamante que conmemora los 60 años juntos.

 

 

Maribel y Jacinto se conocieron en un guateque con 20 y 23 años. “Tuvimos que esperar dos años de novios porque estábamos pendiente de que me llamaran de la mili”, recuerdo Jacinto. Ambos trabajaron en la misma empresa y tuvieron cuatro hijos y 9 nietos. “No había tiempo para nada, ni para agobiarse, porque teníamos una gran responsabilidad familiar”. Su mujer asegura que se volvería a firmar por otros 50 años más, aunque reconoce que como todos hubo altibajos. “Todo se supera con tolerancia, respeto y mucho cariño".

Marina y Enrique coincidieron en la fiesta de Os Liñares de Canido con 15 y 16 años, pero tuvo que pasar un tiempo hasta que se reencontraron en la misma fiesta, tras verse en el tranvía. “En estos años hubo de todo, pero siempre que hay tormenta, luego viene la calma”, dice Marina, para quien la clave es “la paciencia tanto por uno como por otro y saber entenderse”. Ayer celebraron la efeméride con sus dos hijos y cinco nietos.

Luisa, de Coruxo, y Francisco, de Sárdoma, también se conocieron en una fiesta, en la del Rosario de San Andrés de Comesaña, con 20 y 23 años. El secreto de su larga relación es “dos no discuten si uno no quiere”, apunta Luisa. Francisco reconoce que “si bien hubo pocas chispas, si tuvieron muchos truenos”. Tuvieron dos hijas y una nieta.

Junto a ellos también fueron los protagonistas otros tres matrimonios que diez años después volvían a ser objeto de reconocimiento por parte de sus vecinos al cumplir 60 años juntos. Todos recibieron las felicitaciones de los más cercanos, pero también de las administraciones. La delegada territorial de la Xunta, Marta Fernández Tapias se acercó hasta la ceremonia religiosa que ofició el obispo, Luis Quinteiro Fiuza, en la iglesia románica de Coruxo. Por su parte, el alcalde Abel Caballero, acompañado por la diputada provincial, Ana Laura Iglesias, se acercó hasta la comida que tuvo lugar en el hotel Coia y que acabó en baile. Fue un día de fiesta para los vecinos de Coruxo y estas seis familias que reunieron hasta a cuatro generaciones a la mesa.

Jacinto y Maribel

Maribel y Jacinto se conocieron en un guateque y se casaron tras de dos años de noviazgo. “Tuviemos altibajos, pero con tolerancia se superan”

Jacinto y Maribel
Jacinto y Maribel

Pilar y José Pérez 

Pilar y José, de 80 y 81, celebraron con su familia 60 años juntos, toda una vida en que “unos días se discute y otros días, se perdonan”.

Pilar y José Pérez .
Pilar y José Pérez .

Luisa y Francisco

Luisa y Francisco se casaron tras 3 años. Basan su convivencia en que “dos no discuten si uno no quiere” porque “hay pocas chispas y muchos truenos”.

Luisa y Francisco.
Luisa y Francisco.

Maximino y Amelina

Maximino y Amelina volvieron después de diez años a celebrar una nueva efeméride, 60 años de casados, “se llevaron bien, congeniamos”.

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Marina y Enrique

Marina Lago y Enrique Salgueiro se conocen desde adolescentes y pasaron siete años de noviazgo: “La clave para durar 50 años es la paciencia”.

Marina y Enrique
Marina y Enrique

Florinda y Francisco

Florinda y Francisco se conocen desde niños, ya que eran vecinos en Coruxo, “fueron unos años estupendos, compartir toda una vida juntos”.

Florinda y Francisco.
Florinda y Francisco.

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