El sector del juego fue uno de los más castigados por la crisis covid. El anuario del Juego en España 2021, hecho público ayer por el Consejo Empresarial del Juego refleja que la debacle fue general durante 2020. También en Vigo y la provincia, con especial sufrimiento para bingos y máquinas recreativas en bares, debido a las restricciones de hostelería y descenso de ingresos en apuestas y loterías. No obstante, el informe apunta a un inicio de la recuperación en los primeros meses del año, en el juego presencial, aunque todavía a un 50% de la actividad precovid.
En números, el informe refleja que a lo largo del año pasado, en la ciudad se jugó menos en general. El descenso más pronunciado fue en las apuestas deportivas (quinielas) y loterías primitivas (sorteos de números) con descensos de entre el 22 y 23%, mientras que en la de Navidad, la caída fue menor, rozando un 17%.
Curiosamente, la debacle del covid se producía después de una tendencia al alza en cuanto a premios. Por poner un ejemplo, la quiniela, que redujo en más de un millón las ventas en 2020 en una línea descendente desde 2016, incrementó hasta antes de la pandemia notablemente la cuantía repartida en la provincia. De hecho en 2019 repartió en premios más de dos millones de euros, frente a menos del millón de 2018 o el medio millón de 2016.
En cuanto a la lotería de Navidad, 2019 logró un gasto récord: en toda la provincia se vendieron más de 55 millones de euros, algo que se vio correspondiendo al duplicarse la cuantía repartida en premias respecto al año anterior y al multiplicarse por tres respecto a 2017.
El Consejo Empresarial del Juego hace referencia al cierre de salones por las restricciones covid, al ERTE de trabajadores en el sector, que todavía no se ha recuperado al 100% y a la reconversión de actividades. Así afirma que en Galicia hay bastantes operadores de pequeña dimensión que han extendido su actividad a los salones. Recreativos Portas ha pasado de operador a gestionar salones en las Rías Baixas, varios de ellos en Vigo con la cadena Overtake. Recreativos Iglesias opera en la misma zona y en Ourense, aunque con menor dimensión mientras que Explomarsa lo hace en la provincia de A Coruña. En concreto, la ciudad cuenta con 23 salones de juego, dos casas de apuestas y tres bingos, además del casino “satélite” , que tuvo que posponer su inauguración precisamente por la pandemia. En cuanto a los bingos, que en la ciudad supuso ya en los últimos años el cierre de la mitad de salas, el anuario destaca cómo en Vigo, por ejemplo, son los mayores contribuyentes del sector en cuanto a impuestos.
El informe asegura que las crisis siempre golpea especialmente al juego que es el sector que más tarda en recuperarse y pese al aumento de actividad en verano y en la opción más optimista podría llegarse al 89% del nivel alcanzado antes de la pandemia. Los primeros meses de 2020 fueron especialmente complicados, con un “impacto profundo” tanto por la reducción del gasto como por las restricciones en la actividad presencial, de tal forma que el aumento en juego online no llegó a compensar a nivel global a las empresas del sector.
