Vigo

PSA coge ritmo: 700 coches al día y reabre el taller de baterías

Una de las trabajadoras de la planta de PSA Vigo, ayer en la vuelta a la actividad de la factoría.
photo_camera Una de las trabajadoras de la planta de PSA Vigo, en la vuelta a la actividad de la factoría.
Una semana después de retomar la producción de coches, PSA Vigo reabre hoy el taller de ensamblaje de baterías eléctricas procedentes de China. Lo hará con un solo turno de 8 horas, con 45 trabajadores,y una producción de 12 baterías por hora. 
La fábrica está trabajando ahora mismo a un 30% de su capacidad con una cadencia diaria de entre 650 y 700 vehículos -antes del estado de alarma estaba por encima de los 2.200 coches al día-, si bien a partir de la próxima semana la producción se incrementará con la incorporación del turno de noche que supone 1.600 trabajadores más. En estos momentos está trabajando el turno de mañana en las dos líneas de manera rotativa (los 1.600 operarios que estuvieron la semana pasada, se fueron ésta al ERTE y entraron en la fábrica otros tantos). La velocidad de las líneas de montaje se ha reducido un 6% y las pausas se incrementaron en 12 minutos en toda la jornada como medidas de seguridad y prevención dentro del protocolo Covid-19. 
La factoría está ensamblando todos los modelos, si bien hay una mayor producción de los lanzamientos -el Peugeot 2008 y las furgonetas- con respecto a los sedanes, aunque todos están muy pendientes de la respuesta de los mercados mundiales. En cuanto al todocamino, se está fabricando también la versión eléctrica con una veintena de unidades diarias, mientras que las de las furgonetas se lanzarán en 2021.
PSA Vigo maneja un horizonte de entre 8 y 10 semanas para incorporar todos los turnos y volver a niveles de producción normales, si bien no descarta que pueda producirse antes si hay una buena respuesta del mercado. El último equipo en entrar sería el de fines de semana y festivos aunque sólo lo hará en una línea ya que en la otra se iba a estrenar el pasado mes de marzo y la pandemia truncó los planes. También se vino abajo la previsión de producción para 2020: fabricar más de medio millón de coches, un récord histórico de actividad para la planta que ya no podrá batir este año. 

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