El Gobierno dio el primer paso esta semana para llevar a cabo una reorganización total de la estructura de Administración de Justicia. El Anteproyecto de Ley Orgánica de Medidas en Materia de Eficiencia del Servicio Público de Justicia aprobado por el Consejo de Ministros prevé entre otras cosas la desaparición de los juzgados unipersonales y la creación de tribunales de instancia.
Este cambio, que lleva años sobre la mesa con la oficina judicial, supondría eliminar los 38 juzgados unipersonales con los que cuenta Vigo para convertirlos en un único tribunal de instancia. La idea es que este nuevo tribunal esté separado en secciones, civil y penal, donde irían por una parte los jueces, letrados judiciales y funcionarios de los juzgados actuales de Primera Instancia, Contencioso y Mercantil y Social y por la otra, Instrucción y penal, con distintas especializaciones.
La nueva estructura planteada prevé reorganizar recursos, para evitar, como ocurre ahora, que haya juzgados colapsados y otros con menos trabajo con el mismo personal. También se plantearía cambios en los juzgados de Violencia de Género que podrían pasar a ser comarcales o incluso provinciales, así como los juzgados de Paz, que pasarían a denominarse oficinas municipales de Justicia con nuevas atribuciones y dependientes de los tribunales de instancia.
La nueva Ley Orgánica, que pretende aprobar el Gobierno el 31 de diciembre, cuenta con voces críticas. Los sindicatos judiciales consideran que es imposible que esta nueva organización sea efectiva. Según explicarons desde Alternativas na Xustiza, es difícil que haya un sistema único de gestión procesal, ya que cada comunidad tiene uno diferente, como ocurre con loas videoconferencias, lo que lleva a constantes suspensiones o al escaso avance del expediente electrónico. “En la mayoría de juzgados se sigue trabajando con papel y los ciudadanos no pueden aún aceder al expediente electrónico desde su casa”. Por su parte, desde la CIG, aseguran que es una norma sobre la que se está trabajando porque hay muchos aspectos sobre los que no están de acuerdo.
En Vigo, la mayor carga de trabajo la soportan los juzgados de Primera Instancia, con cerca de 13.000 asuntos pendientes, pero también el Mercantil, que asume el 40% de trabajo de la provincia, así como los laborales y de Instrucción.
