El mayor edificio del Casco Vello inicia su "nueva vida"

nnn La rehabilitación del mayor edificio del Casco Vello, el caserón conocido como Palacio de Marqués de Valladares, en la calle Oliva 6, frente a la Colegiata, comienza a tomar forma , lo que permitirá salir de su ruina de años tras darse por finalizada la obra de demolición del interior. Es el paso previo para su reforma integral dentro un ambicioso proyecto del que la promotora no quiere ahora hablar.

Lo que se sabe con certeza es lo que señala la Gerencia de Urbanismo, que concedió la licencia de derribo y la autorización para poner en marcha un proyecto que lleva varios años encima de la mesa y que una vez finalizado ayudará a dar un impulso al barrio histórico.

La Gerencia dio en junio permiso de rehabilitación y una prórroga para la ejecución de la obra, que cuenta con un presupuesto de 1,5 millones a cuenta de la iniciativa privada. Los trabajos más importantes de desmontaje ya han finalizado y se iniciaría con la cimentación de la nueva estructura, según el calendario que maneja el departamento de Urbanismo. Curiosamente esta semana, la propia Gerencia aceptó la propuesta de la comunidad de propietarios de Oliva 6 de renunciar a una pequeña ayuda para la rehabilitación de elementos por importe de 1.158 euros, a cargo de una partida del organismo municipal. Según fuentes municipales, la obra sigue en marcha aunque hasta enero no tomará velocidad de crucero.

La firma Getting Back Stones SL inició en 2015 la promoción del Palacio del Marqués de Valladares, entonces en la ruina, que contaba con una superficie de 4.117 metros cuadrados en cuatro plantas. En julio de 2017 había conseguido ya vía libre al proyecto básico para su transformación en un espacio de uso sociocultural y recreativo según el plan de los arquitectos José Javier Villacé y Martín Cominges.

La propuesta plantea la construcción de 20 viviendas, locales comerciales y garaje de 37 plazas. Lo más llamativo es su uso sociocultural y recreativo, de forma que tendrá utilización pública, siendo de promoción privada. La actuación exige la rehabilitación integral del edificio respetando su tipología y volumen original como el valor artístico del conjunto en una perspectiva de evolución histórica del inmueble catalogado, vinculado ahora a las nuevas actividades económicas. El caserón será en su totalidad público "permitiendo incorporar tanto sus salones como su jardín a la memoria urbana de Vigo". Supone una novedad en la historia del caserón, de accesibilidad acotada por el uso residencial histórico a la familia del Marqués.

La Comisión técnica municipal de Seguimiento del Plan Especial de Reforma Integral del Casco Vello emitió informe favorable al proyecto básico. En abril de 2015 las promotora logró permiso para derribo parcial interior y para las excavaciones de control arqueológico, que finalizaron en 23 de noviembre de 2016, en el que Patrimonio Cultural de Galicia resolvió dar por finalizada la actuación. El 4 de abril la promotora pidió licencia de obras. El edificio sería visitable por parte del público "permitiendo incorporar tanto sus salones como su jardín a la memoria urbana de Vigo". n