Más de cien señales luminosas en la A-55 contra los siniestros

n n n La alta accidentalidad de la autovía entre Vigo y Porriño, que pese a haber reducido drásticamente los siniestros con víctimas mantiene todavía un elevado índice de incidencias, ha llevado a Tráfico a colocar hasta un centenar de señales luminosas en el tramo más conflictivo. 
La medida afecta principalmente a los quince kilómetros desde la salida de Vigo y en los que se sitúan  Segade, el alto de Puxeiros o las curvas de Tameiga. A los numerosos radares implantados en los últimos años, y tras las últimas obras sobre el firme, se han colocado las señales que advierten a los conductores sobre las distintas velocidades aconsejadas al tomar las curvas y se han añadido efectos luminosos de cara a los trayectos nocturnos.
De esta forma, la DGT confía en poder reducir al máximo la siniestralidad en este punto que ha sido históricamente uno de los más peligrosos de la provincia pero que dejó de serlo, al menos en cuanto a víctimas mortales y heridos de gravedad tras los estrictos controles de velocidad. 
El trazado de la autovía y elevado flujo de vehículos que a diario atraviesan la principal conexión de Vigo con la Meseta y Portugal obligan a elevar la precaución en un vial, que es especialmente peligroso en los días de intensa lluvia o baja visibilidad por los bancos de niebla.n