Un lleno histórico con Melendi para cerrar Castrelos

Llegó uno de los conciertos más esperados este verano en Castrelos y con el que se echó el telón a la temporada. Melendi actuó ayer ante más de 25.000 espectadores completamente entregados y con el fenómeno fan en todo su potencial. Fue una actuación histórica en Castrelos con asistentes que llegaron a subirse a la muralla del pazo.

Los primeros de la fila se ganaron el puesto a pulso, ya que pasaron cuatro días acampados en el parque y en la grada hubo algún que otro enfrentamiento por los que quisieron colarse con la intervención de la Policía. “Melendi tuvo miles de peticiones y por eso está aquí. Esta es una noche memorable”, señaló el alcalde Abel Caballero en su presentación.

El asturiano salió entre ovaciones y con la seguridad de quien conoce de sobra el entorno, después de una introducción con estética de 007. Vigo fue una de las paradas de su gira “20 años sin noticias” y tocó los temas más significativos de su carrera. Después de comenzar con “El parto”, sonaron los hits que le abrieron las puertas de la fama: “Piratas del Caribe” o “Con la luna llena”, de su primer álbum “Sin noticias de Holanda”, publicado en 2003 y que fue escogido ese año como banda sonora para la Vuelta Ciclista a España.

Con una puesta en escena espectacular, que incluyó llamaradas de fuego, Melendi sumó al atrezzo la camiseta del Real Club Celta que le entregaron los jugadores Borja Iglesias y Carlos Domínguez, asistentes en la actuación.

“¡Buenas noches Vigo y muchas gracias por venir! Me alegro de ver la cara de las personas que estáis aquí; en el fondo soy un poco tímido y no sé hasta donde llega mi agradecimiento, veo mucha gente joven y quiero reconocerles a los padres, madres, abuelos y abuelas por ese trabajo que les permite estar aquí y por ponerles mis canciones que son muy instructivas”, bromeó en una de sus numerosas interlocuciones al público.

El momento más mágico fue cuando interrumpió el concierto para besar a una niña que estaba en el público con su padre.

Con imagen de malote regenerado, recuperó canciones que hicieron disfrutar a sus incondicionales. No faltó “Caminando por la vida” (2010), ni “Barbie de extrarradio” (2005), ni “Mi rumbita pa tus pies”, que fueron coreadas por la platea. Y al igual que hizo en sus anteriores actuaciones, mantuvo el homenaje a Extremoduro con su tema de 2006, incluido en el disco “Mientras no cueste trabajo”.

Palmas, baile y mucho ritmo acompañaron una noche de celebración. Melendi estaba de fiesta y contagió su entusiasmo a un público que no necesitaba mucho empuje para entrar en una complicidad única con el artista. Después de una noche mágica se despidió con “Gracias por venir”, el tema que compuso para conmemorar los 20 años de la publicación de su primer disco, “Sin noticias desde Holanda” y con “Lágrimas desordenadas” puso el broche de oro.