Leixoes y Sines disputan al puerto de Vigo el tráfico de naranjas

La delegación viguesa formada por empresas y la Autoridad Portuaria (APV) que se desplazó hasta Sudáfrica todavía continuará al menos hasta hoy en el país austral, aunque el presidente de la APV, Enrique López Veiga, se reincorporó a la actividad local. La conclusión de la misión comercial es que Vigo tienen muchas opciones para hacerse con el tráfico de naranjas, entre 25.000 y 50.000 toneladas en cada partida desde mayo o junio en una línea de la naviera MACS, aunque la competencia aprieta y llega desde muy cerca. En especial de los puertos portugueses de Sines (sur de Lisboa) y Leixoes (Oporto), que también aspiran a convertirse en puerta de entrada de esta mercancía en la UE, y en ambos casos mueven más toneladas que Vigo. "Están bien posicionados, como siempre", advierte López Veiga sobre ambos puertos. A favor de la terminal viguesa juega haber realizado un esfuerzo para estar presente en reuniones directas con los representantes de la asociación de cítricos, que ya estuvo en Vigo inspeccionando la instalaciones.

Enrique López Veiga aseguró que los productores de Sudáfrica les indicaron que Vigo sería hoy entre los puertos de España el que más les interesa por sus características, pero Leixoes está muy cerca. "Hicimos nuestra presentación y explicamos las ventajas. Éramos el único puerto español que se presentó allí y ahora hay que esperar, las decisiones las toman cada uno de los productores", explicó. También hablaron con algunos de ellos sobre las ventajas de Vigo como puerto referente de fruta, que lo será cada vez más. "El pabellón de Vigo quedó bien, pero deciden los productores", unos 30, todos a gran escala. Sobre el volumen que Vigo podría captar, Titus Van Lieshout, de MACS y Fresh Fruit, señaló que de entrada serían -si se logra el contrato- 25.000 toneladas. "No me atrevo a hacer pronósticos, fuimos e hicimos todo lo posible. La disposición es buena", añadió López Veiga , quien apuntó que Vigo se aprovecharía de que en los puertos de Valencia, destinatarios originales, hay una actitud política contra las importaciones en la zona. "Pero en la UE no hay cabida a prohibirlas", avisa.