¿Por qué aumenta la demanda de testamentos vitales ante notario?
Más o menos sube un 30% cada año. La gente empieza a entender que las voluntades deben quedar claras, sobre todo para la gente joven. En un deterioro importante, cuidar a una persona puede ser frustrante por luchar ante algo que no tiene solución y este documento es una herramienta de información muy importante.
¿Qué cambia la entrada de la Ley de Eutanasia en 2021?
Con esa regulación, se garantiza que la decisión sea exclusiva del paciente. Facilita que las cosas sean libres cuando existe una clara voluntad. No es como lo han querido vender, la persona tiene que estar plenamente consciente y se decide no alargar su vida pero siempre bajo un exclusivo control médico.
¿Qué ofrece entonces el testamento vital?
Es un documento muy útil porque se ponen en él ciertas voluntades, como ser o no incinerado, la donación de órganos o incluso el contenido en la esquela o en la lápida. Deja todo claro a través de un consentimiento a una persona que confía en su criterio. A veces en dos. Pero no suelo recomendar que sean más, es mejor un interventor y un sustituto por si renuncia.
El aumento en la edad media, ¿a qué se debe?
Es algo anecdótico, posiblemente debido a los avances médicos. Puede que también haya ahora más conciencia social. Es un tema del que se empieza a hablar con naturalidad y eso es bueno, porque se piensa que no te va a pasar hasta que sucede. Además el documento notarial es bastante barato, unos 70 u 80 euros.
