Sin embargo, desde el inicio de la pandemia todos estos proyectos quedaron en pausa ante la dificultad de ensayar y actuar en directo en tiempos de pandemia, dando inicio a su carrera en solitario, con la que ya está presentando su segundo trabajo, "Elevator Muzak Club".
¿Cómo fue grabar un disco durante la pandemia?
Lo empecé en Santiago de Compostela durante el confinamiento, cuando me interesé un poco más por la producción musical y nuevos programas informáticos, intentando buscar un sonido más analógico que en el anterior trabajo.
Lo grabé mientras vivía en un edificio donde solo había tragaluces y no podía ni ver la carretera en la cuarentena. Me resultaba cada vez más difícil concentrarme mientras hacía la tesis doctoral, y empezaba a perder un poco la noción del tiempo. Nunca sabía cuándo estaba en horario laboral o de creatividad. Grabar este disco me ayudó a despejar la mente durante el confinamiento, mientras componía las horas pasaban más rápido.
¿Con que medios lo grabaste?
Tenía muy pocos recursos en el piso, ni siquiera altavoces. Todo el disco está hecho con unos auriculares y un ordenador. Yo vengo de un mundo donde lo más importante es conocer tu instrumento y cómo hacer música en grupo, pero este trabajo consistió más en conocer tu software, ya que si no tienes las herramientas para producir desde el ordenador estás limitado. Prácticamente todo está grabado con instrumentos virtuales. Simplemente le conecté un teclado con el que controlarlos y un micrófono. También hay algunas guitarras, pero muy pocas.
¿Es diferente componer en solitario en lugar de hacerlo en una banda?
Cuando estás en una formación musical, el resultado final no deja de ser el punto en común de todos los integrantes. En este caso solo estaba yo, lo utilicé un poco como cajón de sastre de todas las ideas que tenía.
¿Cuál es el concepto detrás de este trabajo?
Me gusta que cada álbum que saque tenga una finalidad propia, una temática y atmósfera características. El anterior trabajo que grabé en solitario exploraba el estilo del "vaporwave", mientras que éste tiene un sonido más "chill". Cada disco es una historia nueva.
Este álbum es como el hilo musical de un ascensor en un antiguo hotel que solo conocen algunas personas. Los que van allí buscan olvidar el mundo de ajetreo y de locura, entrar en una burbuja para pausar su vida y charlar de cosas anodinas y banales. Cada canción de este disco cuenta una historia en las distintas plantas de este ascensor. Además, todas tienen esa estética muy tranquila pero también un tanto oscura, porque cuando nos intentamos recluir siempre encontramos ese lado más introspectivo.
¿El lanzamiento y la promoción también se limitarán al mundo digital?
Si, no creo que haga copias físicas. Hoy en día existen todas las herramientas posibles para saltarse la necesidad de promotoras o distribuidoras y que la gente tenga la música al alcance de la mano. Aún así, este mundo pasa por un momento muy difícil y yo nunca me lo planteo como un trabajo. He compuesto álbumes que ni siquiera he publicado, los hacía para mi mismo.
Como ahora no tenía la satisfacción musical de poder tocar en directo he sacado estos discos. Los grabo y los mezclo yo. Además, para hacer las portadas me apoyé en mis amigos, al final queda todo en un círculo muy familiar. La gente siempre tiene la vía de apoyar al artista de una forma u otra pero mientras no se pueda hacer otra cosa esto es lo único que nos queda.
¿Echas de menos la música en directo?
Para mi los directos eran una parte esencial de mi vida. Es como si de pronto no pudiera ir al psicólogo, por así decirlo. Es una situación complicada, no es cómodo pero esperemos que solo sea por un tiempo. La música no ha muerto aunque ahora no tengamos los directos.
Además, las bandas están paradas, no nos podemos reunir para ensayar, VigoSónico está cerrado y era una de las mayores canteras de músicos de Vigo. Creo que es algo que notaremos sobre todo a la larga, porque este tipo de instalaciones son fundamentales para la gente que está empezando a ensayar y no se puede permitir hacer una gran inversión de dinero. Pero sin estos grupos que están empezando no tendremos bandas consolidadas en el futuro. Creo que después de la pandemia tendremos agrupaciones más pequeñas y proyectos en solitario ante la dificultad de tocar en grupo.
