La fiscal afirma en el juicio que hubo "ensañamiento" en la brutal paliza de Hernán Cortés

La sede de la Audiencia en Vigo celebró la última sesión del juicio contra dos jóvenes ourensanos (Gregorio G.R. y Adrián S.H.) acusados de propinar una paliza a otros dos vigueses en enero del pasado año durante una noche de fiesta en la calle Hernán Cortés. Había quedado pendiente la declaración de un último testigo de la agresión, que confirmó que uno de los acusados, en concreto el que más violento se había mostrado, fingió pedir perdón para asestar un ultimo golpe a una de las víctimas.

Tanto las acusaciones como las defensas reiteraron sus posiciones iniciales tras terminar con la prueba testifical. Así, el Ministerio Fiscal pide 6 años de prisión para Gregorio y 4 años y 9 meses para Adrián por sendos delitos de lesiones con el agravante de deformidad y las acusaciones particulares, 6 y 5 respectivamente, ya que estas apreciaron alevosía en las acciones de los acusados. La diferencia entre las penas propuestas para ambos se debe a que, de acuerdo con los letrados, Gregorio tuvo un mayor grado de participación en la agresión, aunque las tres acusaciones coinciden en la coautoría de ambos.

Durante la lectura de los informes, la fiscal fue especialmente contundente al respecto: “Entendemos plenamente acreditado el agravante de ensañamiento”, expresó, refiriéndose, sobre todo, a la última patada anteriormente mencionada: “Es una conducta totalmente innecesaria para un delito de lesiones e incrementa el sufrimiento de la víctima”.

Aunque la abogada del Ministerio Fiscal reconoció que las pruebas contra Adrián y Gregorio “pueden ser indicios débiles y puede parecer insuficientes, todas apuntan de forma unívoca en una dirección, que los dos acusados dieron una paliza a las dos víctimas”.

Por su parte, las acusaciones particulares defendieron que, además de ensañamiento, hubo alevosía durante la paliza.

Uno de los acusados: "Esto es una caza de brujas"

Al término del juicio, uno de los acusados, Adrián S.H., tomó la palabra (Gregorio declinó hacerlo) para recordar que, en el sistema judicial español, un acusado es no culpable "hasta que se demuestre lo contrario" y para denunciar la exposición pública a la que estuvo sometido a raíz de este proceso. "Nuestros nombres y fotos salen en todas partes. Hay una caza de brujas sobre nosotros", lamentó, antes de insistir: "Yo no pegué ni lesioné a nadie". Su letrado cuestionó algunos de los testimonios escuchados e insistió en que su patrocinado, "si es que es el que se ve en el vídeo", "no tomó parte directa en ninguna acción" y recordó que el autor del vídeo de la agresión confirmó que las víctimas habían estado insultado y amenazando previamente a quienes luego les golpearon. Mientras, la abogada de Gregorio negó la participación de su cliente en esos hechos e insistió en que no hay pruebas concluyentes que permitan identificarlo como el chico que aparece en el vídeo golpeando a una de las víctimas.