El escudo de Aduanas, el último vestigio
El escudo franquista de la fachada de la sede de Aduanas, en Areal, ha conseguido convertirse en el último vestigio en la ciudad del anterior régimen, pese a encontrarse en un edificio de la Administración General del Estado. Por alguna razón desconocida, la ley de Memoria Histórica se ha olvidado del águila y el yugo y las flechas, escondidos tras la arboleda del jardín que prolonga la Alameda, en una calle estrecha por la que no pasa casi nadie. En el pasado desaparecieron los escudos del anterior régimen que presidían el Rectorado de Areal, ahora Zona Franca; de la Casa das Artes, de la Estación Marítima (el primero retirado, en los años ochenta, siendo presidenta del Puerto Elena Espinosa) o de Correos, y más recientemente del instituto Santa Irene: aprovechando la reforma, la Xunta tapó el escudo con metacrilato, y así se anunció la liquidación del último que quedaba en las calles. En realidad, no es así.
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