“Este tipo de agresiones no entran dentro del concepto de sumisión química que teníamos hasta ahora y no está muy claro qué cantidad de sustancia, si es que hay alguna, se inyecta a estas mujeres”. Esto explicaba ayer la jefa de Urgencias del Cunqueiro, Maite Maza, que está volcada en este momento con su servicio y con la dirección en organizar la asistencia para este tipo de casos y la toma de muestras que se debe hacer, puesto que algunas son decisión de otras instancias.
En ese servicio se ocupan fundamentalmente de atender a la víctima, mientras que el análisis de posibles sustancias corresponde a laboratorios externos. Sin embargo, como facultativos señalan que “es poco probable que de forma rápida y en poca cantidad se pueda administrar algo que pueda hacer daño a la víctima” y apuntan también que el pinchazo alerta a la víctima, por lo que no parece sumisión química.
Por todo ello, consideran que parece una agresión con un componente imitativo y vandálico más que de utilizar drogas o sustancias para anular la defensa y la voluntad de la víctima. Con todo, preocupan las posibles lesiones y el contagio de otras enfermedades, a pesar de que “es muy improbable” y de hecho en los casos conocidos hasta ahora no se han producido repercusiones graves.
Desde Urgencias recuerdan que fue un caso aislado teniendo en cuenta la gente que sale habitualmente de ocio nocturno y que no se debe generar alarma. Ahora bien, piden a cualquier persona que sufra este tipo de agresiones que no solo acuda a un centro sanitario sino que presente una denuncia para que se pueda articular la respuesta adecuada.
Preguntada por los mareos que sufren algunas víctimas de los pinchazos, explican que en Urgencias no cuestionan si la persona está mareada o no, sino que atienden al paciente y dan los pasos necesarios para asegurarse de que no sufra consecuencias mayores.
Actualmente, solo el área sanitaria de Ourense tenía implantado el protocolo de sumisión química y el Sergas tenía previsto extenderlo en breve al resto de Galicia. En el Cunqueiro, tenían previsto aprobarlo este año.
