Vigo ya tiene aprobados de forma definitiva los presupuestos municipales de 2023, los mayores en la historia de la ciudad con 292 millones a los que se sumarán adicionalmente fondos europeos y créditos extraordinarios hasta rozar incluso los 400 millones. Como ya ocurrió con la aprobación inicial, la mayoría absoluta del grupo socialista fue suficiente para dar luz verde a los presupuestos, frente a los votos en contra de los siete ediles que suman en conjunto el PP, Marea de Vigo y BNG.
El concejal de Hacienda, Jaime Aneiros, aseguró que estos presupuestos contribuirán a “transformar la ciudad como se vio especialmente en estos ocho últimos años de mayoría” y aseguró que están construidos alrededor de cinco ejes: la atención a las personas con 22,5 millones en bienestar social, los servicios públicos de calidad con más de 82 millones, las humanizaciones con más de 28 millones, la dinamización de la ciudad con apoyo al comercio y el turismo así como la política redistributiva con 35 millones en ayudas directas a familias y asociaciones.
Por su parte, el portavoz del PP, Alfonso Marnotes, criticó que en un contexto de pérdida de población y presencia industrial en la ciudad “tienen que pensar si los presupuestos pueden ser un instrumento para intentar revertir esta situación”. Así, lamentó que estas cuentas solo dedican a la promoción del empleo el 1,75%, a la económica el 2,2% y a bienestar social el 7,1%, mientras que el gasto corriente es más de 152 millones.
Rubén Pérez, de Marea de Vigo, afirmó que “la mayoría absoluta no inhabilita la democracia” y pidió una mayor participación ciudadana y de la oposición a la hora de elaborar las cuentas. En esta misma línea, Xabier P. Igrexas, del BNG, criticó que “se rechazaron con argumentos burocráticos todas las alegaciones vecinales formuladas por diferentes colectivos y asociaciones”.
