SEMANA SANTA

La Borriquita volvió con nuevo recorrido

La Borriquita, de la Cofradía del Silencio, abrió ayer el programa de procesiones de la Semana Santa viguesa con estrenando recorrido.
photo_camera La Borriquita, de la Cofradía del Silencio, abrió ayer el programa de procesiones de la Semana Santa viguesa con estrenando recorrido.
El Domingo de Ramos estrenó las procesiones de Semana Santa, que regresaron tras la pandemia. Miles de fieles, en la bendición

La salida de La Borriquita de María Auxiliadora se retrasó. Lo hizo después de dos años sin procesión a causa del covid, aunque en la edición pasada formó parte de la exposición de pasos de la Cofradía de Nuestro Señor Jesús del Silencio, titular de la imagen. La expectativa era máxima entre los que esperaban su salida; sin embargo, lo hacían menos fieles de lo que es habitual en la cita más multitudinaria de la Semana Santa viguesa.

 

 

Encabezada por el grupo de tambores de la Cofradía del Silencio, tiraron del carro los voluntarios de la asociación Vodea. Tras la imagen de La Borriquita abrió la comitiva el secretario de la Cofradía del Silencio, Juan Carlos Carballido, con la cruz procesional; el obispo, Luis Quinteiro Fiuza, acompañado por el delegado episcopal de la Semana Santa, Carlos Borrás y los representantes políticos: Marta Fernández Tapias, delegada territorial de la Xunta; Ángel Rivas, concejal de Fiestas y el edil popular, Alfonso Marnotes. El nuevo itinerario llevó a la comitiva por Velázquez Moreno y Príncipe, donde tuvieron que esquivar la exposición de fotografías a la altura del Marco. En la plaza de A Farola esperaba el grueso de la procesión, donde también acudió el alcalde, para asistir a la bendición de los ramos, que normalmente se realiza en Porta do Sol, actualmente en obras. “Me alegro muchísimo de ver la ilusión con la que los niños ven pasar a Jesucristo; ellos son los grandes protagonistas del Domingo de Ramos y para todos ellos daré una bendición especial”, afirmó el obispo desde el escenario instalado para la ocasión.

Los menores, vestidos en su mayoría de ceremonia, estaban presentes en casi todos los grupos asistentes. Al aviso de la bendición, levantaron las palmas y los ramos de olivo para finalizar con una serie de ovaciones: ¡Viva Jesús!

Con la lectura sobre la preparación de la entrada de Jesús en Jerusalén se contextualizó la salida de La Borriquita. Tras esta breve parada continuó por Colón y García Barbón hacia el templo Santiago de Vigo, acompañada por las marchas procesionales interpretadas por la banda Ateneo Musical de Bembrive.

La Borriquita del centro fue la única procesión en salir ayer en Vigo. La de Bouzas, recuperada hace unos años por la Cofradía del Nazareno y de la Virgen Dolorosa, permaneció en la  iglesia, ya que en la villa no pudieron recuperarse del parón ocasionado por la pandemia y no programaron procesiones para esta Semana Santa.

El programa continuará hoy y hasta el miércoles con la celebración del Triduo pascual de la Cofradía del Silencio, en Santiago de Vigo que finalizará con la invocación á Virxe da Amargura a cargo de Carmen Areas Villarroel. Las procesiones volverán el Jueves Santo, con la de La Pasión en el centro (Rosalía de Castro, 20 horas) y la del Nazareno y la Dolorosa, en Teis (Divino Salvador, a las 19 horas); el Viernes Santo tendrá lugar el Santo Entierro (Basílica, 20) y la del Encuentro (Rosalía de Castro, 20 horas) para acabar con el Vía Crucis en A Guía, a las 23 horas.

LOS ASISTENTES

“Solíamos ir a Bouzas, pero como este año no sale, venimos al centro”

FAMILIA GARCÍA
FAMILIA GARCÍA

Ángela acompañó a la Borriquita a las pequeñas de la casa, Marta, Aroa, Candela y María. “Acudimos todos los años, solíamos ir a Bouzas, pero como este año no sale, venimos al centro para seguir con la tradición del Domingo de Ramos, en el que  hay que estrenar”.

 

“Traigo a los niños a esta procesión por el horario, son pequeños para las otras”

FAMILIA CRESPO CABRERA
FAMILIA CRESPO CABRERA

Marta Cabrera llevo a sus hijos, Blanca y Sancho, a La Borriquita. “Los traigo esta procesión por el horario, vienen desde bebés, al igual que me traían mis padres; aún son muy pequeños para ir a las otras procesiones, ya los iré introduciendo poco a poco”.

 

“Llevamos tres años sacando la imagen, es un orgullo para  nosotros”

JUAN GARCÍA MALLO, CON LOS VOLUNTARIOS DE VODEA
JUAN GARCÍA MALLO, CON LOS VOLUNTARIOS DE VODEA

Juan García Mallo coordina el grupo de voluntarios de la asociación Vodea: “Llevamos tres años sacando la imagen, es un orgullo que cuenten con nosotros, estamos encantados de poder colaborar porque cada vez hay menos personas dispuestas a hacerlo”.

“Es la segunda palma de Jaime, está bendecida y la guardamos todo el año”

FAMILIA LOMBARDÍA
FAMILIA LOMBARDÍA

La madre, la abuela y la madrina llevaron al pequeño Jaime a La Borriquita: “De la Semana Santa acudimos a esta procesión porque es la de los niños, es su segunda palma, al estar bendecida la guadamos todo el año; mantenemos la tradición con esta nueva generación”.

“La gente prefiere el ramo de olivo, las palmas son para los niños”

ADRIÁN, VENDEDOR DE RAMOS
ADRIÁN, VENDEDOR DE RAMOS

Adrián lleva más de cinco años abasteciendo de ramos a los asistentes de la procesión de La Borriquita a cambio de la voluntad. “Las corté en mi casa, la gente prefiere el olivo, porque es más tradicional; las palmas son para los niños porque queda bonito”.

“Tocar en La Borriquita es algo diferente, muy entretenido”

ENRIQUE, DEL ATENEO MUSICAL DE BEMBRIVE
ENRIQUE, DEL ATENEO MUSICAL DE BEMBRIVE

La banda del Ateneo de Bembrive, junto al grupo de tambores de la Cofradía del Silencio, fue la encargada de acompañar a La Borriquita desde la plaza de A Farola, donde se realizó la bendición de los ramos, hasta Santiago de Vigo: “Interpretamos cuatro piezas hasta la iglesia; tocar en la procesión es algo diferente a lo que solemos hacer, es un acto multitudinario y muy entretenido”, apunta Enrique, flautista de la banda.

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