Así se imagina la inteligencia artificial a una persona de Vigo

Bien es conocido últimamente que la IA está empezando a desenvolver tareas cada vez más complejas. A nivel académico, muchos son los debates que avalan o reniegan el uso de esta, sin hablar del ámbito artístico, en donde existe un temor -tal y cómo pasó en su día con la fotografía y la pintura- a que acabe por relegar definitivamente a la cámara.

Sin embargo, todo ello son rumores, y por ahora lo que si es capaz de hacer es la construcción de imágenes a partir de un chat en el que explicar cómo se quiere la imagen. Cuánto más especificaciones se escriban, más próxima será a la realidad la imagen generada. Por este motivo, es necesario empezar por el principio, y preguntarle a este innovador utensilio cómo se imagina a un hombre y una mujer de Vigo.

Por su lado, el hombre es de mediana edad, con canas y rasgos suaves en donde no destaca ninguno por encima de los demás. La mujer, por su parte, presenta un tono más claro de cabello que se ilumina con el sol, y su edad es ligeramente más joven. El equilibrio de su cara no está tan centrado como el del hombre, siendo la zona de la mandíbula y la barbilla las más fuertes.

Arraigados culturalmente pero abiertos al mundo

Después, ha descrito las principales características de la personalidad y la cultura en la ciudad:

Una persona de Vigo, como muchos gallegos, suele ser trabajadora, amable y reservada. Debido a la historia marítima e industrial de la ciudad, especialmente en la pesca y la construcción naval, muchos vigueses están profundamente conectados con el mar. Esto se refleja en su carácter práctico y resiliente.

Culturalmente, las personas de Vigo valoran sus tradiciones gallegas, aunque la ciudad también es moderna y dinámica. Les gusta disfrutar de la buena comida, como el marisco fresco, y suelen ser muy sociables, disfrutando de reuniones familiares y con amigos.

En cuanto a su actitud, los vigueses tienden a ser orgullosos de su ciudad y de su identidad gallega, pero sin perder su apertura al mundo exterior, especialmente a través del puerto, que ha sido una puerta al Atlántico y más allá.

En resumen, una persona de Vigo combina la calidez y la hospitalidad gallegas con una mentalidad moderna y trabajadora, siempre con un pie en el mar y el otro en sus raíces culturales.