El boom de los tatuajes en la piel suma ahora en Vigo el modelo 'low cost'

Ana Valtierra de Bonito Cadaver, haciendo un tatuaje en un brazo.

Los tatuajes siguen estando de moda en Vigo. Son alrededor de 60 los estudios de tattoo que están abiertos en toda la ciudad, sin embargo, esta ‘moda’ que tanto ha evolucionado técnicamente durante los últimos años ha llevado también a que se acreciente la modificación y borrado de estos.

Uno de los seis tatuadores del estudio Kremlin tatuando la pierna de un hombre.

Bonito Cadaver fue uno de los primeros estudios de tatuaje que abrió en la ciudad. Formado por un grupo de mujeres, 10 años después sigue desempeñando la todavía muy de moda práctica entre los vigueses. Tal y como asegura Ana Valtierra, responsable del local “la práctica de este arte fue poniéndose más de moda desde hace cinco años” no obstante, en el estudio también han notado un incremento de clientes que acuden para tapar o borrar esos tatuajes que ya no les gustan, “la técnica ha evolucionado mucho durante los últimos años, hay quien se los borra directamente pero muchos vienen a intentar tapar lo que se tatuaron y ya no les gusta, si podemos lo tapamos y si es muy difícil taparlo hay quien se da un par de sesiones láser para borrarlo un poco y después tapamos”.

Rataloka Tattoo lleva cinco años y medio abierto, con una clientela variada que oscila entre los 17 y los 80 años. Su dueña, Andrea Martínez asegura que cada vez se tatúa más gente, “cuando abrí el estudio eramos muy poquitos, sin embargo ahora ya hay casi 60 estudios en Vigo, creo que está muy de moda en la ciudad, más todos los que tatúan en casa”. La gerente de Rataloka insiste en que al estar tan de moda hay personas que quieren hacerlo de igual forma, pero por falta de dinero deciden llevar a cabo esta práctica en lugares 'low cost', “tenemos clientes que vienen con verdaderos destrozos que cogen ofertas tipo 3 tattoos 50 euros y nosotros los tenemos que arreglar'.

Este centro de tatuajes además ha incorporado recientemente el servicio de borrado de tattoo, de la misma forma que se incrementó el tatuarse también lo hizo el borrárselo, “incorporamos este servicio hace un año y medio a petición de los clientes y la alta demanda del servicio, una vez al mes viene un chico de A Coruña que nos lo hace”.

Samantha Tschneider dirige el estudio Kremlin. Tan solo hace año y medio que cogió el relevo de este local, sin embargo, cuenta con un equipo de tatuadores con gran experiencia, Alejandro Hernández, Pablo Villareal y Jorge Rodríguez llevan 13, 7 y 15 años tatuando, de la misma manera que el resto de estudios, los artistas coinciden en que el mundo del tatuaje cada vez está más de moda y mejor visto, “hace 50 años el tatuaje era algo más carcelario y se pensaba que era algo que acarreaba poca medida sanitaria, a día de hoy es muy transparente” asegura Tschneider.

Desde el estudio confirmaban que cada vez hay más coberturas de esta forma de arte en la piel, los artistas del tatuaje de este estudio coincidían en que se está convirtiendo en una práctica apresurada y que la persona que se lo realiza debe dejarse aconsejar por un profesional de confianza, no llevar a cabo esta práctica con ‘cualquiera’.