JOSÉ M. HIDALGO CUÑARRO Arqueólogo y especialista del castro de Vigo

“Aquí se excava mucho por obligación, no para investigar por lo que faltan las publicaciones”

José Manuel Hidalgo Cuñarro, en el set de Atlántico TV.
photo_camera José Manuel Hidalgo Cuñarro, en el set de Atlántico TV.

José Manuel Hidalgo Cuñarro (Estrada, 1956), responsable de los blogs “Vigo arqueológico” y “Arqueovigo”, está al frente de un estudio que actualiza la información sobre el yacimiento estrella de la ciudad, “Memoria arqueológica del castro de Vigo. Cultura castreña y romanización de Vigo”. Arqueólogo municipal y director del Museo de Castrelos de 1992 a 1999, dirigió las excavaciones de los 80 en el parque y defiende su puesta en valor, tal y como explicó por su paso Atlántico TV.

 
¿Qué importancia tiene el yacimiento vigués?

Es conocido por los vigueses y destino obligado para los visitantes, un parque de referencia en el origen de la ciudad. Se calcula que en Galicia debe haber entre 2.000 o 3.000 castros, en Vigo, más de 27. Este es extraordinario, se calcula que ocuparía 20 hectáreas, similar al de Santa Trega. Lo que se puede ver solo representa el 10% de un yacimiento que ocupa todo el parque y que llega hasta Camelias. A partir del siglo I hay que unirlo al Vigo romano de Areal. Pese a que dicen que Vigo no tiene pasado, tiene mucha historia, al levantar cualquier pavimento del centro aparecen restos. Hace 2000 años esta era una gran ciudad.

¿Hay posibilidades de aumentar la zona excavada?

Se podría ampliar un poco la zona vallada. Los cortes estratigráficos dieron muy buenos resultados en 1987 y 1988; hicimos varios sondeos de 2 metros por 2 metros en todo el monte lateral y comprobamos que el poblado se extendía también por lado opuesto, por el naciente. La única zona arrasada corresponde al castillo, construido entre los siglos XVII y XVIII, algo normal, ya que se usaron las piedras para la muralla y la cimentación. Para completar la musealización del yacimiento, se podría crear un espacio en la misma fortaleza con piezas originales, para contar la historia desde el poblado castreño al castillo, un centro interpretación. Están haciendo una intervención en los pasadizos y podría tener su encaje. La visita al castro se completaba con una sala monográfica en el Castrelos, pero ahora ya no existe, se limita a una vitrina. 

¿Se requiere un Plan Director?

Se necesita establecer las líneas básicas. En este último trabajo que estamos realizando estamos repensando todo lo que nos da y englobarlo a momento anterior. Aquí se excava mucho por obligación, no para investigar; paralelamente hay que hacer el estudio de materiales y faltan estas publicaciones. Como decía un amigo, lo excavado sin publicar es como un yacimiento destruido. Desde el año 2000, las publicaciones son mínimas, 0,1%

¿Qué aportaron estas últimas excavaciones?

Mucho, sobre todo a nivel romano. Son intervenciones en el centro de la ciudad, todas conocidas, desde las salinas que demuestran la impresionante capacidad industrial de la época romana, y su posicionamiento en el Atlántico, era un paso obligatorio entre los otros puntos costeros. En los siglos V y VI aún había un gran densidad población.

¿Las fuentes escritas romanas hacen alusión al castro vigués?

No específicamente. Son escritos realizados desde la parte sur, referencias de navegantes muy someras de cómo era la gente de los castros. Hay que tomarlas con precaución porque son noticias interesadas para justificar la conquista. El arqueólogo tiene que confirmar si lo que dicen los clásicos es  verdad. 

¿Entonces las únicas fuentes de información  están bajo tierra?

Hasta la epigrafía latina del siglo I no hay ninguna fuente directa. La única fuente es la arqueología.

¿Son necesarias más prospecciones?

No vamos a perforar todo el monte. Ese 10% excavado aportó información muy buena, con la que se puede montar un museo en condiciones. Se hallaron muchos elementos que dan una visión muy clara. Además el castro siempre estuvo presente en la mente de los vigueses. La primera referencia del yacimiento es de 1888 con el portugués Martín Sarmiento, responsable de Briteiros. En 1929 se encontraron elementos clave al excavar los depósitos de agua. La corporación municipal invitó al mejor arqueólogo que había entonces en España y el Museo de Pontevedra trasladó una comisión técnica en la que estuvo Castelao.

Te puede interesar