55 carrilanas, en la XIX Baixada de Carros de Bolas de Freixo

El Freixo (Valladares) congregó ayer a cientos de personas para contemplar su ya tradicional Baixada de Carros de Bolas, con 55 vehículos participantes en su décimo novena edición.

No es una prueba federada, así que el principal objetivo es divertirse y por supuesto no hacerse daño. Para ello, los participantes ponen toda su imaginación para engalanar los carros y disfrazarse, mientras que los organizadores, la Peña Freixo, aporta las medidas de seguridad en los sitios más complicados.

A la cita acude gente de los alrededores pero también de fuera porque es una bajada que gusta. Son mil metros de cuesta con varios tramos muy pronunciados y zonas de curvas en forma de ‘ese’. Lo habitual es hacerlo en menos de dos minutos, aunque algunos veteranos lo cubren en cuatro minutos.

Ayer hubo de todo entre las carrilanas, desde los que iban disfrazados de vigilantes de la playa brasileños hasta los que optaron por los personajes de manga de la serie Dragon Ball hasta los vikingos, también muy de moda, disfraces de policías, de barco , de pene o de caja de cerveza, que provocaron las risas de los asistentes. "Se trata de pasar un buen rato y además lo que se premia aquí es la originalidad", contaban los organizadores.

Al terminar la prueba, pasadas las ocho de la tarde, hubo premios y un sorteo.

La Peña Freixo se creó en 1994 y desde entonces viene animando la vida cultural de la parroquia con festivales como el Freixo Rock, entre otros. Participan asimismo con puestos en la Festa da Reconquista y en la de Bouzas.