El Centro de Investigación Marina de la UVigo (CIM) formalizó ayer el contrato con el astillero Rodman Polyships para la construcción de un buque oceanográfico de última generación con propulsión híbrida enchufable, por un valor de 1,5 millones de euros y con un plazo de ejecución de ocho meses. El catedrático de la Universidad de Vigo y director del CIM, Daniel Rey, valora positivamente la adjudicación ya que “demuestra la calidad y capacidad naval de Vigo y su área para aportar soluciones tecnológicas innovadoras en el ámbito marino, encajando estas con las políticas de Puerto Verde defendidas por la Autoridad Portuaria de Vigo y que también comparte el CIM”, destacó el principal responsable del centro, quien también adelantó que “en los próximos días se realizará un acto público con la empresa adjudicataria para sellar la colaboración”.
Por su parte, la directora de Marketing y Comunicación de Rodman Polyships, María Herrero, afirmó que están “muy contentos” por este nuevo contrato. “Supone un nuevo reto desde el punto de vista técnico y de innovación, ya que esta embarcación incorporará un sistema híbrido de propulsión que le permitirá una navegación soportada 100% por energía eléctrica. Además, se instalará un sistema de autogeneración eléctrica a través de energía eólica”.
La embarcación, que contará con un tamaño medio de 19,5 metros de eslora por 5,4 metros de manga, fortalecerá la posición de Vigo, y de Galicia en general, en la investigación oceanográfica costera, permitiéndole abordar con mayor garantía y competencia algunos de los desafíos sociales más críticos relacionados con el cambio climático y ambiental, la pesca, la biodiversidad o la gestión de riesgos.
Se estima que la construcción de la estructura del buque debería estar finalizada en otoño, para luego proceder a la instalación de equipamiento en cubierta como un guindastre en uno de los costados, un pórtico en popa y un cabestrante para el manejo y despliegue de equipos pesados. Posteriormente, se realizarán pruebas con las que comprobar su correcto funcionamiento. Así, la plena operatividad del buque se podrá alcanzar, si todo va según lo previsto, en la primera mitad de 2024.
