Por segundo año consecutivo, la plaza de O Berbés se inundó de ciencia con motivo de la celebración de la G-Night, noche de las personas investigadoras. Se trata de una iniciativa que tiene lugar en las siete ciudades gallegas y cuyo esfuerzo de coordinación corre a cargo de la Universidad de Vigo.
En la edición de este año, cerca de 400 personas trabajan para llevar la ciencia a los ciudadanos de a pie, cosa que en Vigo se dejó ver en hasta tres lugares diferentes: la plaza de O Berbés, el edificio Redeiras de la UVigo y el café Vitruvia.
En la primera se instaló una expo-feria con más de una decena de puestos en los que investigadores de diferentes departamentos del campus vigués organizaron diferentes talleres con los que acercaron al público de manera participativa su trabajo en el día a día. Además, las asociaciones estudiantiles UVigo Motorsport y UVigo Spacelab presentaron en esta exposición sus proyectos, concretamente el monoplaza UM-22 y el nanosatélite BIXO, que se lanzará al espacio en 2024. Hasta allí se acercó el rector, Manuel Reigosa, acompañado por la vicerrectora de Investigación Belén Rubio y la vicerrectora de Comunicación Mónica Valderrama, para el acto inaugural. El mandatario de la universidad hizo hincapié en la importancia de acercar el trabajo de los investigadores de la universidad a las calles de la ciudad y elogió la labor de las cientos de personas que, coordinadas por la UVigo, organizaron los eventos de esta G-Night, que se celebra en las siete principales ciudades de Galicia.
El edificio Redeiras acogió, por su parte, cinco charlas y un coloquio durante toda la tarde, algunas de ellas de carácter telemático –celebradas en Santiago y A Coruña– y otras en el propio inmueble de la UVigo, como las ofrecidas por los investigadores Sara Recondo y Miguel Cuevas.
En el café Vitruvia, ya casi de noche, tuvieron lugar tres charlas enfocadas a un público más adulto por parte de Elena Alonso (Cintecx), Adreu Blanco (CIM) y Víctor Hernando (CIM) sobre el papel de los recursos minerales en la descarbonización y digitalización de la economía, la protección de los mares y los microorganismos degradadores de plásticos.
