La puesta en marcha este mes de julio del programa de la Universidad de Castilla-La Mancha “UCLM Rural. Universitarios ante la despoblación” reavivó la esperanza de los jóvenes de poder tener un futuro laboral en los pueblos. La apuesta de la institución académica abrió la posibilidad de que los jóvenes se acerquen a entornos rurales donde promover el empleo y combatir también así el fenómeno de la despoblación mediante la realización de prácticas en empresas e instituciones localizadas en zonas poco pobladas.
Gema Peñalver y Roberto Sierra son dos de los jóvenes universitarios de Castilla-La Mancha que iniciaron sus prácticas en el marco de este programa, en el municipio de El Real de San Vicente (Toledo), ambos en la Asociación Ateneo Rural Paulo Freire 2030. Gema tiene 21 años y estudia el Grado de Educación Social en Cuenca pero es de Camuñas, en la provincia de Toledo, y Roberto tiene 22 años y estudia el Grado de Trabajo Social en Talavera de la Reina, de donde es originario. Las prácticas que realizan consisten en identificar historias de vida desde el punto de vista del trabajo social y detectar las necesidades y recursos de distintos colectivos del municipio, sobre todo de las personas más vulnerables.
Roberto señaló que decidió participar en este programa porque “UCLM Rural” pretende ser “un Erasmus interno” que le permite desarrollar el trabajo social comunitario en un entorno que tiene que recuperar a los jóvenes para “dejar de hablar de la ‘España vacía”, mientras que Gema hizo hincapié también en que contribuye a “acercar la universidad a lo rural”.
Ambos estudiantes han expresado su deseo de poder desarrollar su futuro laboral en el entorno rural, Roberto porque dice sentir “apego a la comarca de Talavera” y Gema porque quiere trabajar para mejorar la situación de las zonas rurales en las que cree que “faltan recursos, medios e iniciativa”.
Por otro lado, Fernando Rovetta, profesor de la UCLM en Talavera y coordinador de la Asociación Ateneo Rural Paulo Freire 2030, entidad en las que los dos estudiantes realizan sus prácticas, indicó que estos dos universitarios se incorporaron a una entidad cuyo objetivo es afrontar el despoblamiento en las zonas rurales con acciones relacionadas con el ecosistema y la revitalización del turismo. En concreto, los dos estudiantes trabajarán en una primera etapa de análisis de necesidades de colectivos como mujeres organizadas en asociaciones, jóvenes que todavía no están organizados, niños y personas mayores. De esta manera, tratarán de dar respuesta a esas necesidades, también las de los jóvenes de la localidad que tienen formación pero al mismo tiempo tienen complicaciones para el ingreso en el mercado laboral.
