EEUU percibe que la ofensiva israelí puede ser insostenible

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, avisó ayer que, en estos momentos, la nueva operación israelí en la ciudad gazatí de Rafá puede convertirse en una situación “insostenible” y en modo alguno terminará con la presencia de las milicias del movimiento islamista palestino Hamás en la zona.

En una entrevista con el programa Face the Nation, de la cadena CBS, Blinken insistió de nuevo en que EEUU sigue necesitando de Israel un plan “creíble” tanto para la situación actual como para el futuro de Gaza para que ambos países actúen en completa sintonía.

En la misma entrevista, Blinken confirmó que Estados Unidos suspendió un envío de bombas pesadas a Gaza, las llamadas “bombas tontas” de 900 kilos, por su carácter indiscriminado al carecer de un sistema de guiado, pero avisó además de que su país se reserva el derecho a paralizar el envío de “ciertos sistemas” de armamento si Israel decide finalmente efectuar una incursión por tierra a gran escala en Rafá.

Entrada en Yabalia

Pese a las advertencias estadounidenses, las Fuerzas Armadas israelíes informaron ayer de la entrada de varias divisiones en Yabalia, en el norte de la Franja de Gaza, en una nueva operación que fue precedida de un intenso bombardeo en las inmediaciones del considerado como mayor campamento de desplazados del enclave palestino.

La incursión, iniciada durante la noche, se debe a que Israel detectó un “reagrupamiento” de fuerzas de Hamás en la zona, indicando que tenían “información de inteligencia sobre la presencia de terroristas y la reconstrucción de infraestructuras terroristas del grupo terrorista Hamás en la zona”.

Israel además, anunció la apertura del paso de Erez Occidental, en el norte de la Franja, para facilitar la entrada de ayuda humanitaria en el enclave palestino.

Mientras, su presidente, Isaac Herzog, comunicó con motivo de la celebración del Día de la Independencia de Israel que se aprobará una amnistía que eliminará todos los antecedentes de militares, reservistas y otras personas que contribuyeron a la seguridad de Israel.

Una "tarea sagrada"

Por su parte, Netanyahu lanzó un mensaje apelando a la unidad de judíos, drusos, cristianos, musulmanes, beduinos y circasianos en la “tarea sagrada” de destruir a Hamás. “Hemos completado aproximadamente la mitad de la misión, pero vamos a terminar esta tarea sagrada” -subrayó el primer ministro israelí- “Vamos a combatir juntos porque esta es la única forma de derrotar a los monstruos de Hamás, que quieren destruirnos”, argumentó Netanyahu.

Mientras, el brazo armado de Hamás, las Brigadas Ezzeldín al Qassam, aseguraron que atacaron con bombas portadas por drones dos de los carros de combate Merkava utilizados en la incursión israelí.

Naciones Unidas ve las evacuaciones que afectarán en Yabalia a entre 100.000 y 150.000 personas, como desplazamiento forzado, ilegal bajo el Derecho Internacional.