Iria Malvido acepta, tras las presiones, dimitir como concejala en Cangas

La todavía primera teniente de alcalde de Cangas, Iria Malvido, del PSOE, presentará su dimisión hoy tras las presiones recibidas desde que se conoció que está acusada de un presunto delito contra la seguridad vial al ser cazada por la Policía Local en la madrugada del martes conduciendo su vehículo con una tasa de alcohol de 0,84 mg/l, el triple del máximo permitido. Según un comunicado emitido por el PSOE, Malvido informó ayer al secretario provincial, David Regades, de su “decisión personal” por “el profundo afecto que tengo por Cangas y por mi partido”. “El PSOE es y será siempre mi partido y al que le debo la honra de haber sido concejala para trabajar por mi pueblo”, expresó para añadir que espera que su "dimisión sea un grano de arena para defender esa Política con mayúscula que siempre reivindiqué; cometí un error grave y asumo las consecuencias”.

Este escrito de los socialistas fue trasladado a los medios después de hacerse pública la decisión del Consello Local del BNG, con su alcaldesa Araceli Gestido como máxima responsable del gobierno tripartito de Cangas, de apartar a Malvido de todos sus cargos públicos y de la petición de reunir de urgencia la Comisión del Pacto para el PSdeG pueda explicar qué persona la sustituirá. Si bien demandaba a los socialistas clarificar cuál era la situación con actual de la concelleira después de que en la mañana de ayer anunciase su baja temporal del partido pero no su marcha.

“De no resolverse esta situación, el Consello Local del BNG de Cangas a través de sus competencias en el gobierno municipal, procederá a la retirada de las delegaciones cedidas a la actual tenencia de alcaldía con base en un comportamiento impropio de un cargo público”, precisaron argumentando esta decisión en que el “pacto de gobierno está hecho entre organizaciones y no entre personas individuales”. Con la dimisión de Malvido, ahora solo le quedará aclarar quién la sustituirá en sus cargos públicos. Los nacionalistas cangueses se amparan en que “estamos ante hechos muy graves contra la seguridad pública y viaria en todo caso inadmisible” por lo que “reafirmamos nuestro compromiso con la seguridad, así como también con el ejemplo que las representantes públicas deben ser y dar”. “Entendemos que cualquier cargo público debe ser consecuente con estos principios y asumir las responsabilidades legales y políticas que conllevan determinadas acciones”, advierten.

Una opinión que comparte IU, tercera pata del gobierno local que ya pidió a Malvido la dimisión el miércoles por la tarde. La situación recuerda al mandato anterior de Victoria Portas cuando el entonces portavoz socialista, Eugenio González, y la edil Pilar Nogueira, fueron cesados por meter la excavadora en las dunas de Rodeira. Casualidades, el siguiente de la lista socialista es Eugenio González.