Alberto García, impulsor del Foro Intercomunitario: "Hay que llevar la ciencia a las calles de Vigo"
Alberto García es profesor jubilado e impulsor del Foro Intercomunitario de Investigación Juvenil
La duodécima edición del Foro Intercomunitario de Investigación Juvenil se celebrará la semana que viene y uno de sus principales impulsores, el docente jubilado del CPR Alborada Alberto García, visitó AtlánticoTV para hablar de esta iniciativa.
Duodécima edición del Foro Intercomunitario. ¿Qué cabe esperar de esta cita?
Van a participar 114 alumnos con sus profesores, que vienen desde 2 centros de Cataluña y otros 6 de toda Galicia. Esperamos que lo pasen igual de bien disfrutando con sus proyectos y las experiencias que traen. Han pasado todo el año trabajando en ellos y vienen con una ilusión tremenda. Inauguramos el jueves 23 por la tarde y el viernes 24 será todo el día, en el Hotel Coia, para hacerlo en el mismo lugar que la convivencia y así no tener que desplazarnos. El sábado 25 haremos una visita cultural a Cangas.
¿Qué tipo de proyectos presentan?
Hay de todo. No solamente proyectos de investigación con método científico riguroso, también hay proyectos en los que los chicos presentan cómo funcionan las cosas. Hay tecnología aplicada a la investigación, hay proyectos sobre la naturaleza y ecosistemas, sobre aspectos sociales como la influencia de las nuevas tecnologías...
Ha estado muchos años en el CPR Alborada. ¿Cómo lo viven los alumnos?
Ellos tienen un club de ciencias, al igual que todos los centros que vienen al Foro. La idea es hacer proyectos de investigación durante todo el año y que puedan explicarlos a la gente en distintas ferias. La diferencia que tiene el Foro es que lo hacen sin competir, simplemente es el gustazo de explicarles a los compañeros lo que han hecho durante todo el año. El entusiasmo es general, ellos disfrutan muchísimo lo que están haciendo.
Se dice mucho que falta vocación científica, pero en el Alborada el club de ciencias tiene mucho éxito. ¿Hay cantera?
Yo creo que sí, lo que pasa es que no está tan a la vista de mucha gente. Hay muchísimos centros que tienen clubs de ciencias y trabajan muy bien. Acabamos de venir de una feria en Barcelona y es tremenda la cantidad de niños y niñas que van a estos eventos. No tengo duda de que hay cantera, y las mujeres están pisando fuerte.
En las carreras científicas, en especial las tecnológicas, las mujeres apenas son el 30%. ¿Qué puede estar fallando?
Yo supongo que será dedicarle tiempo a orientación o a estimulación. Porque sobre todo en ingenierías y tecnologías hay muchas menos mujeres. Por alguna razón, no parecen atractivas para ellas, pero pienso también que poco a poco se están metiendo ahí.
Hace falta apostar por la divulgación científica, entonces.
Sí. Actividad, conocimiento, implicación... Eso hay que palparlo, tienen que vivirlo. Hay muchos chicos que prueban en el laboratorio y no les gusta la expereincia. Pero hay que ser prácticos en esa cuestión, enseñarles en la práctica lo que es un proyecto de investigación.
Volviendo al club de ciencias del Alborada, ¿cómo surgió?
Fue en 2006 y salió de ver la necesidad que tenían los chicos de no quedarse en el aula con la teoría, querían llevarlo un poco más allá: trabajar con el método científico y disfrutar de la ciencia. Empezamos trabajando con poquito alumnado y hacíamos un día al año dedicado a la ciencia. Fue todo un éxito. Los alumnos veían a sus compañeros explicando sus proyectos y querían probar. Y a partir de ahí, se fueron apuntando más y no hemos parado.
Ahora la UVigo apuesta mucho por esto, relizando ferias científicas en la calle. ¿Qué le parece?
Perfecto. Es una cosa que hablaba con gente, de la necesidad que tenía Vigo de la ciencia en la calle. Hay actividades que hace la UVigo o el CSIC montando carpas en la calle, pero una feria de ciencias como la hay en muchísimos sitios era imprescindible. El año pasado hubo unos 60 proyectos de investigación y miles de visitantes. Para mí era una necesidad, tienen que proliferar estas cosas porque el ciudadano muchas cosas no conoce lo que se hace en los centros y luego cuando van a la calle quedan entusiasmados.
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