Año 2002. ¿Cómo fueron aquellos comienzos?
Fue un proyecto muy ilusionante que nacía para impulsar el I+D y la competitividad del potente y pionero sector de automoción de Galicia. CTAG se convertía en el socio tecnológico del centro de Vigo de Groupe PSA y de la industria de componentes. Por aquel entonces el centro empezó con 50 profesionales y nuestros campos de trabajo nacían orientados hacia la seguridad, la innovación en diseño, nuevos materiales y prototipos rápidos, y contábamos también con laboratorios para realizar ensayos de metales o plásticos y análisis medioambientales y de vibraciones. Actualmente estamos especializados en electrónica, vehículo autónomo e industria 4.0.
Y afrontando una pandemia. ¿Afecta al centro tecnológico?
La pandemia ha provocado una incertidumbre en el sector automoción y una aceleración de los cambios tecnológicos a la que no somos ajenos. En CTAG creemos que debemos responder al desafío que supone esta situación con más tecnología y estamos trabajando para encontrar nuevas oportunidades que nos permitan liderar la transición y la reactivación del sector de automoción.
¿Aspiran a obtener ayudas del fondo europeo de recuperación económica?
Sí, estamos participando en la definición de un proyecto para todo el sector de Galicia con el objetivo de conseguir fondos europeos. Creemos que es necesario aprovecharlos. Queremos liderar desde Galicia la transformación que exige la próxima movilidad inteligente, sostenible, conectada y autónoma. AutoAncora es un proyecto de I+D+i que se va a centrar en la puesta en marcha de dos grandes laboratorios de investigación para impulsar los motores de hidrógeno y eléctricos y avanzar en la nueva movilidad a través del coche autónomo inteligente.
Coche autónomo, fábrica inteligente, centro de excelencia electrónica. ¿Qué será lo siguiente?
Hemos puesto en marcha la creación de un nuevo laboratorio de Inteligencia Artificial que permitirá el desarrollo de métodos que garanticen la ciberseguridad del vehículo.
¿De qué horizonte hablamos de cara al coche del futuro y cómo será?
Será autónomo e inteligente, con un mayor grado de confortabilidad, más seguro y más responsable con el medioambiente. Existen cinco niveles de conducción automatizada y ya disponemos de vehículos en el mercado que ofrecen tecnologías de los primeros niveles (1 y 2), pero tendremos que esperar algunos años para ver en circulación vehículos completamente autónomos. La fábrica del futuro estará definida por la implementación de tecnologías que la transformarán en hiperflexible e inteligente como visión artificial, robótica colaborativa, gemelo digital, big data o inteligencia artificial. Además, tendrán un gran impacto la progresiva incorporación de exoesqueletos y otros dispositivos que facilitarán la ergonomía de los operarios.
Recientemente CTAG acogió un simposio de exoesqueletos. ¿Aspiran a fabricarlos en Porriño?
Nuestro papel es estudiar, desarrollar y validar los exoesqueletos con el objetivo de ayudar a las empresas a incorporar estos sistemas a sus plantas de producción para la mejora ergonómica en los puestos de trabajo. CTAG se ha incorporado recientemente al centro de excelencia mundial Get2Excel.org que aglutina todos los avances mundiales en este campo.
Si tuviera que elegir un proyecto de los desarrollados por CTAG, ¿con cuál se quedaría?
Es díficil, pero por la envergadura del proyecto destacaría la creación de una división especializada en electrónica y sistemas inteligentes de transporte en 2005, con su posterior ampliación con las primeras pistas en 2014.
¿Habrá ampliación del centro tecnológico?
La tecnología avanza rápido y las empresas demandan medios de última generación, por lo que la inversión en medios e instalaciones y el esfuerzo por tener equipos de profesionales altamente cualificados es imprescindible para estar a la vanguardia. Consideramos fundamental seguir invirtiendo en instalaciones y medios que proporcionen nuevos servicios a las empresas e impulsen la generación de líneas de investigación relevantes en Galicia.
