El coche eléctrico echa el freno y se caen proyectos en Europa

El frenazo que está dando el coche eléctrico en España y en Europa está frustrando los planes de inversión de fabricantes automovilísticos y otras empresas del sector, que dejan sus proyectos en ‘stand by'. El caso más cercano lo tenemos en la planta de Stellantis Vigo, donde a partir del 1 de septiembre habrá una bajada de producción del Peugeot 2008 (tiene versión ‘e’) que la empresa achaca a la caída generalizada de la demanda de los vehículos electrificados. El taller de ensamblaje de baterías que tiene la factoría de Balaídos también redujo la actividad.

Además, el grupo anunció recientemente junto con Mercedes Benz la suspensión de la construcción de una planta de baterías de litio en Alemania a través de la ‘joint venture’ que tienen con TotalEnergies. La empresa alemana BASF acaba de hacer público que aparca su proyecto para levantar una fábrica de reciclaje de baterías en España y que lo retomará, llegado el caso, “cuando vuelvan (los coches eléctricos) a ganar impulso en Europa”. Audi, por su parte, va a reestructurar la planta que tiene en Bruselas y prevé interrumpir la producción de uno de sus modelos cero emisiones.

Renault descarta levantar una gigafactoría de baterías en España y Volkswagen retrasó sus planes para una cuarta fábrica ante el lento crecimiento de este mercado en el continente europeo. La compañía china Svolt canceló una de las dos instalaciones que tenía prevista en Alemania y Ford, LG Energy y Koç Holing pusieron fin al acuerdo para construir una en Turquía. Todos estos proyectos frustrados conviven en el tiempo con el desembarco masivo en Europa de coches eléctricos chinos, a los que la CE busca poner freno con un incremento de los aranceles a la importación de estos vehículos.

Son sólo algunos ejemplos ante la desaceleración de las ventas de electrificados (eléctricos e híbridos enchufables), que en España cayeron un 11,5 por ciento el pasado mes de junio y acumulan un descenso de un 1,5%por ciento desde enero. En Galicia bajaron más, un 27 por ciento el mes pasado. Estos datos se reflejan en la producción industrial, con un 15 por ciento menos en lo que va de año, y una advertencia de la patronal Anfac, que asegura que así no se cumplirán los objetivos de descarbonización.