Solo tiene 20 años, pero Carlos Alcaraz ya ejerce de gran campeón en prácticamente todos los aspectos. Por supuesto, por ránking -es el número 2 del mundo- y por títulos -suma dos Grand Slams-. Pero también en otros detalles menos llamativos, como por ejemplo la capacidad que está evidenciando para ir de menos a más en el Open de Australia. Como los grandes. Alcaraz jugó en la madrugada del domingo al lunes su mejor partido en Melbourne. Una exhibición con la que aplastó a Miomir Kecmanovic en menos de dos horas (6-4, 6-4 y 6-0).
La consistencia del jugador de El Palmar quedó de manifiesto en que no concedió una sola bola de break a su rival. El rosco del tercer set no tuvo historia, con el serbio totalmente hundido moralmente después de claudicar en el segundo parcial, el que más chicha tuvo del encuentro. Tras anotarse la apertura con un 92% de efectividad con primer servicio, Alcaraz se vio más exigido en el segundo. Kecmanovic echó el resto y, por momentos, sometió al segundo favorito del torneo. En esos momentos, supo mantener la calma y también su servicio hasta que llegó su oportunidad con 3-3. Break a la primera. También como los grandes.
Ya en cuartos de final aparecen las verdaderas curvas para Alcaraz. Alexander Zverev será el rival del murciano tras volver a sufrir de lo lindo, en esta ocasión ante Cameron Norrie, al que batió en el tie-break del quinto (7-5, 3-6, 6-3, 4-6, 7-6(3)). No obstante, el campeón olímpico y número 6 del mundo es el primer rival de verdadera entidad para el español.
Por esa parte del cuadro, el otro enfrentamiento de cuartos medirá a Daniil Medvedev con Hubert Hurkacz. Por la parte alta, Novak Djokovic se las verá con Taylor Fritz, mientras que Jannik Sinner se enfrenta a Andrei Rublev en el partido más atractivo de la antepenúltima ronda.
En mujeres, ya sin españolas, la parte baja depara unos interesantes Aryna Sabalenka-Barbora Krejcikova y Coco Gauff-Marta Kostyuk. Por arriba, sin la número 1 del mundo Iga Swiatek ni la 3 Elena Rybakina, los enfrentamientos son algo más descafeinados: la checa Linda Noskova -verdugo de Swiatek- contra la ucraniana Dayana Yastremska -llega desde la fase previa- y la rusa Anna Kalinskaya ante la china Qinwen Zheng, que tiene buena ruta hacia la final.
